Morenés valora la silenciosa defensa de la unidad de España
MADRID.Actualizado:En un discurso con mayor carga de profundidad que el del Rey, el ministro de Defensa, Pedro Morenés, agradeció la contribución silenciosa y ejemplar de los militares «en defensa del bien común de toda la Nación española, que se sustenta en los principios de la soberanía nacional, y la unidad y la solidaridad de todos los españoles», en un claro guiño al debate soberanista que se dirime en Cataluña.
Morenés hizo una alocución en clave netamente castrense, centrada en la limitada operatividad de las Fuerzas Armadas fruto de los recortes en su departamento, trufada con algunas menciones a la situación económica, política y social del país. Para ello puso como ejemplo a los militares por su solidaridad «con la situación general de España y con los sacrificios y esfuerzos de sus conciudadanos en los momentos más duros».
«Ellos han sido los primeros en adaptar su actividad a unos presupuestos muy limitados, y lo han hecho manteniendo en lo más alto su capacidad y nivel de preparación. Estoy convencido de que seguirán siendo solidarios en el futuro, y también que la sociedad sabrá responder a ese esfuerzo dotándoles de los medios acordes a las necesidades de una Defensa que en este inestable mundo adquiere si cabe más importancia», aseguró.
Dirigiéndose directamente a don Juan Carlos, el ministro ejemplificó en su figura «el ejemplo de coraje personal y de sensibilidad social para superar toda circunstancia».
Disciplina y obediencia
Morenés, un ministro que con el paso del tiempo ha mejorado su valoración en las encuestas dentro del suspenso generalizado del Gobierno, explicó que los miembros de las Fuerzas Armadas y de la Guardia Civil son «conscientes de su responsabilidad» y que «la esencia de este comportamiento está en los valores de la disciplina, obediencia y jerarquía que forman parte de la columna vertebral del comportamiento del militar».
El ministro hizo a continuación un balance de las operaciones en el exterior que han desarrollado nuestras tropas en 2013, citando en primer lugar el repliegue de la provincia afgana de Badghis, que definió como «la operación logística más demandante y complicada que nuestros militares hayan desarrollado en las últimas décadas».
No obstante, dejó claro que esta retirada «no es de ninguna manera el final del compromiso que España tiene con el pueblo afgano» y adelantó que el Gobierno continuará con la gestión de la base aérea de Herat y el hospital militar. Asimismo, enumeró las misiones que las Fuerzas Armadas mantienen en Líbano, Somalia, Malí y República Centroafricana, el último teatro de operaciones con presencia española.