Un menú de Navidad 'low cost' para una noche especial
La crisis agudiza el ingenio a la hora de diseñar la cena en familia
Actualizado:La crisis económica hace que los portuenses se las ingenien para crear un menú de Navidad con la denominación ‘3B’, bueno, bonito y barato. Los comerciantes del Mercado de Abastos notan cómo la venta de ciertos productos ha disminuido considerablemente, «está la cosa fatal, hemos bajado hasta en un 40% la venta de material», explica Israel Sánchez, dueño de una de las pescaderías de la plaza de abastos.
El factor clave en el descenso de ventas de pescado fresco es que los ciudadanos comienzan sus compras a finales de noviembre, «pueden llegar a ser hasta un 50% más baratas y lo congelan hasta el 24 diciembre», cuenta Sánchez. También en la sustitución de productos está el truco para elaborar los menús que engalanarán las mesas. La propuesta la hace Paula Muñoz, que trabaja en otra de las pescaderías, «los clientes en vez de comprar cigalas, se llevan galeras que son mucho más baratas, al igual que los pechos de cangrejo que tienen un precio muy alto, lo sustituyen por mejillones y la pescadilla por gallineta para hacer el paté de cabracho».
Imaginación en la cocina
Aunque se prefiere el pescado fresco, la crisis ha hecho que cada vez más portuenses se inclinen por adquirir más productos congelados debido a que presentan un coste más económico. Por el contrario, la carne no sufre tanto descenso en las ventas, «los precios no se han incrementado, siguen igual y eso el cliente lo agradece» explica Benito Martínez, dueño de una carnicería. Comenta que lo que más vende son los rollos de carne y el cordero, aunque el producto estrella en estas fechas sigue siendo el pavo, «el cliente se lo lleva porque está bien de precio y además cunde mucho», detalla.
Seguramente, uno de los platos más servidos de primero en esa noche será el tradicional puchero, «cuesta muy poco hacerlo, te vale para varios días y con este frío apetece» comenta Dolores Ríos. Mañana, los puestos de pescado se verán favorecidos por la medida tomada de permitir la apertura de sus locales y así poder vender pescado fresco. Será también una oportunidad para los portuenses de llevar a casa el género sin necesidad de congelar .