LA MEJOR RESPUESTA

Es un tópico desgastado en el mundillo pero no por ello deja de ser una realidad contundente. El mejor sitio donde puede hablar un futbolista es en el campo. Postura inteligente la adoptada por Raúl Agné y sus pupilos frente a la inquietante situación que toca vivir en el terreno institucional.

El entrenador es el primero que sabe que el bien de todos pasa porque el Cádiz cumpla sobre el verde y en esas está. Entre ceja y ceja sigue teniendo el partido a partido que conduzca al objetivo perseguido: el ascenso. Y eso que las noticias que llegan del entorno invitan a la confusión y no parecen, al menos, tranquilizantes.

Se han producido retrasos en los pagos y a día de hoy no se sabe a ciencia cierta quiénes serán los que manejen, en adelante, los designios del club. Entre tanto, el Cádiz ya ve a cinco puntos a sus perseguidores por los puestos del 'play off' y se mantiene a tiro de piedra de los líderes del grupo, a los que tiene a cuatro puntos.

Fuera de Carranza lo pasa mal, pero se ha encontrado con muchas adversidades. Eso sí, ante los suyos no falla. Los amarillos son, junto al Albacete, los que mejores números presentan como locales. Únicamente han cedido dos empates ante La Hoya y Cartagena, dos de los rivales que se encuentran entre los cuatro primeros.

La última goleada cosechada en La Roda demuestra que Agné mantiene enchufadísimos a los suyos, y aunque en lo que va de campeonato se hayan vivido momentos difíciles, lo cierto es que este Cádiz transmite seguridad, en líneas generales.

No por ser el deber encomendado hay que dejar de reconocer el valor que tiene lo que está haciendo hasta ahora el de Mequinenza con el Cádiz. Está consiguiendo que las turbulencias que llegan de fuera no afecten al vestuario, y esa es la línea que tendrá que seguir hasta el final de la temporada.