Un 'selfie' benéfico
David Cameron sugiere a su homóloga danesa sacar a subasta la polémica fotografía y destinar la recaudación a una causa solidaria
MADRID.Actualizado:El funeral por la memoria de Nelson Mandela, una de las figuras más emblemáticas del siglo XX, no parece, a priori, el escenario más idóneo para un momento 'selfie'. No es extraño pues que haya sido esta una de las imágenes más difundidas del sepelio celebrado en Johannesburgo la pasada semana. Junto a una Michelle Obama visiblemente irritada, los máximos dirigentes británico y estadounidense accedían a inmortalizar tan solemne ceremonia con un smartphone propiedad de su homóloga danesa, Helle Thorning-Schmidt, en el centro de la imagen. Ahora, esa controvertida fotografía podría servir para ayudar a los más desfavorecidos.
La intrahistoria de tan insólita postal consiguió un recorrido amplio en medios internacionales y redes sociales. Los protagonistas tuvieron que dar explicaciones más de una y dos veces. El primer ministro británico, David Cameron, aseguró que habría sido «de mala educación» rechazar la petición de la mandataria danesa. Ella, más resuelta, no entendía la polémica y se defendió con un sencillo pero tajante «los políticos también tienen derecho a divertirse».
Sin embargo, dada la repercusión del autorretrato y las críticas recibidas, la mandataria danesa tenía tomada la decisión de destruir, es decir borrar, la instantánea de su móvil. Pero de momento, la foto -que solo han visto los tres protagonistas- continuará con vida gracias a una idea del premier británico.
Y es que Cameron pretende zanjar la controversia con un gesto de buena voluntad y, según publica 'The Sunday Times', habría sugerido a la artífice de la 'autofoto' sacar la imagen obtenida a subasta y destinar la recaudación a fines benéficos. Sin lugar a dudas que el precio por hacerse con la imagen sería elevado, no solo por los tres retratados, sino por el contexto histórico en el que se produjo.
Thorning-Schmidt, que en pocos días ha motivado más titulares que en dos años de legislatura, ya advirtió de que la fotografía tenía muy mala calidad, aunque por el momento nadie descarta ninguna posibilidad. Sea cual sea el destino final de la instantánea, cuya repercusión ha superado con creces precedentes protagonizados por estrellas del cine o la música, quedará la incógnita de qué pasaba en aquel momento por la mente de Michelle Obama, la inquilina de la Casa Blanca, comparsa involuntaria de uno de los momentos más insólitos del año.
En cualquier caso, ayer también se supo que en el mismo acto de homenaje a Mandela que se prolongó por cuatro horas, Michelle Obama también tuvo tiempo para fotografiarse con el móvil junto a la novia del vicepresidente argentino Agustina Kämpfer. «Selfies out! Nosotras preferimos pedirle a alguien», bromea la propia Kämpfer en su cuenta de Twitter, en la que ha compartido la instantánea en referencia a que ellas prefirieron pedir a una tercera persona que les hiciera la foto.