Aznar Botella: «En tu amigo existe dolor». Blesa: «Nunca me arrepentiré de haber actuado así»

Varios mensajes y correos electrónicos intercambiados por el expresidente de Caja Madrid, Miguel Blesa, y José María Aznar Botella, hijo de José María Aznar, que forman parte de los casi 8.700 emails requisados por Elpidio Silva, el juez que encarceló al banquero, han sacado a la luz la polémica relación entre ambos.

Todo se produjo entre los años 2008 y 2009, cuando la crisis económica comenzaba a estar en su apogeo y un tiempo antes de que Caja Madrid entrara en el ojo del huracán por sus problemas financieros. Según las informaciones publicadas por El País y eldiario.es, José María Aznar Botella pidió a Blesa que adquiriera obras del artista Gerardo Rueda, amigo de Aznar y fallecido en 1996, por 54 millones de euros, cantidad que podría haber ascendido hasta 100 millones si se acababa concretando la construcción de un museo del artista en Madrid, en un edificio propiedad del Ayuntamiento capitalino que Ruiz Gallardón, entonces alcalde, se comprometía a ceder por 50 años. Pero la entidad bancaria consideró el proyecto "inabarcable" y se negó a participar en él.

A partir de ahí, en julio de 2009, se producen los mensajes (en concreto, sms que Blesa se reenviaba a su correo electrónico) que han sido hechos públicos por estos medios y que muestran cómo acabó la negociación, con un Aznar Botella decepcionado (y por lo que se deduce de los mensajes, su padre, el expresidente del Gobierno, sentía también "dolor y decepción") y un Blesa "perplejo" por lo que estaba ocurriendo.

Aznar Botella: "Con los pelos que se ha dejado por ti y han sido muchos, me parece impresentable lo que has hecho o no has hecho".

Blesa: "Puede que seas muy joven para entenderlo: algún día no te explicarás haber escrito ese mensaje. Yo nunca me arrepentiré de haber actuado así, la Caja tiene sus procedimientos, no es mi cortijo. A tu padre nunca le ha decepcionado la seriedad y honestidad de un amigo".

Aznar Botella: "Si quieres pregunta a tu amigo por el mensaje que te mandé. Te puedo asegurar de que existe dolor y decepcion, y no tiene nada que ver con el resultado del tema ni con tus responsabilidades. Hay muchas formas de hacer las cosas y aquí por lo que parece se han hecho muy mal".

Blesa: "Por lo visto, me has mandado tu mensaje después de hablar con él, me quedo perplejo. Hacerme culpable a mi es ir muy desencaminado. Pero no quiero decir más, esto es muy desagradable. Ojalá todo quede en el olvido"