Los clásicos arrasan en el Falla

Nochebuena de un año cualquiera de los primeros del XIX. El salón de la casa de los Stalbaum está decorado para la fiesta. Llegan los invitados, entre ellos, Drosselmeyer, un viejo chiflado, inventor de juguetes y amigo de los niños. El anciano, disfrazado de mago, hace un pequeño espectáculo teatral en el que el Rey de los Ratones quiere secuestrar a la Princesa, pero el valiente Cascanueces le derrota y salva a la Princesa. Así arranca el famoso ballet de Tchaikovsky 'El Cascanueces', y así lo pudieron disfrutar los asistentes al Gran Teatro Falla, donde el Ballet Imperial Ruso ofreció su segunda función en Cádiz, después de que ayer encandilase al auditorio con la representación de 'El lago de los cisnes'. Para ambos espectáculos, el aforo del coliseo se ha quedado pequeño. Todas las entradas agotadas semanas antes de las citas y eso que la compañía ya trajo estos clásicos a la provincia hace casi dos años.