La plantilla de recogida de basura aplaza las movilizaciones hasta el lunes

La plantilla del servicio de recogida de basura del municipio celebró en la noche del lunes una asamblea en la que acordaron «darle un voto de confianza al alcalde y suspender las movilizaciones hasta el lunes», explicó Tomás Calvo, de Comisiones Obreras. Y es que tras la concentración frente al ayuntamiento que tuvo lugar el martes, el alcalde recibió a una representación de los trabajadores para conocer de primera mano el asunto. «Ernesto Marín se comprometió a mediar entre nosotros y la empresa para la firma del convenio», añadió el sindicalista.

El primer edil confirmó su compromiso con los trabajadores y después de este encuentro, ayer tuvo una «primera toma de contacto» en la que estuvo presente el delegado de Medio Ambiente, Nicolás Aragón. «Nos queda reunirnos con Urbaser para conocer las dos posturas», añadió. No obstante, consideró que los extremos de empresa y plantilla «no creo que estén tan distantes».

Marín afirmó, además, que en los próximos días se sentará con la empresa para «poder dar alguna respuesta a los trabajadores la semana que viene». Lo que sí dejó claro es que no es «intención de nadie» que se produzcan despidos, «a los hechos me remito, no se ha producido ningún despido de empresas municipales», terminó.

Manifestación por el centro

Por su parte, Tomás Calvo aseguró que los 70 trabajadores del servicio de recogida de basuras esperan el lunes una respuesta por parte del alcalde. Y celebrarán una asamblea tras la manifestación que tienen prevista desde Chiclana Natural hasta el Consistorio a las doce. En ese encuentro, y según las novedades que obtengan, decidirán si continuar con las protestas previstas hasta el 20 de diciembre. También siguen en el aire medidas más contundentes como la huelga del servicio, «que se planteará en la asamblea».

La plantilla del servicio municipal de recogida de basura inició la semana pasada un calendario de movilizaciones para denunciar la situación de bloqueo en la que se encuentra actualmente la negociación para la firma del convenio colectivo. Frente a la petición de los trabajadores de mantener las condiciones que actualmente tienen, aseguran que la empresa pretende aumentar la jornada laboral de 35 a 37 horas semanales, así como aplicar recortes de salario y antigüedad. De este modo, los trabajadores creen que se prescindiría del sueldo de siete empleados.

La última asamblea de trabajadores de Urbaser tuvo lugar en la noche del lunes en la sede de CC OO, donde se congregó «la mayoría» de la plantilla, integrada por unos 70 trabajadores. Los representantes sindicales expusieron la situación a los asistentes, que acordaron «por unanimidad» paralizar las acciones de protesta para dar un margen de confianza a la mediación que prometió Ernesto Marín en el encuentro del mismo lunes. La próxima asamblea se celebrará el lunes, 16 de diciembre, donde la plantilla marcará el rumbo de sus protestas según la situación.