El pesimismo prevalece entre los consumidores españoles
MADRID.Actualizado:El pesimismo respecto de la economía es el sentimiento dominante entre los españoles de a pie a pesar de la multitud de mensajes positivos lanzados por el Gobierno, la banca y las empresas. El Índice de Confianza del Consumidor que elabora el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) registró en noviembre un avance mensual de siete puntos, hasta situarse en 72,3 puntos, pero sigue deprimido.
La confianza mejora tras su descalabro de octubre, pero está lejos de reflejar un nivel aceptable. Este indicador calcula cada mes un valor entre cero y doscientos, en el que todo resultado inferior a cien puntos indica pesimismo. Aún así, el CIS señala que en noviembre los españoles mejoraron su percepción sobre el estado actual de la economía y las expectativas.
El 59,8% de los encuestados perciben que la situación actual de la economía es peor que hace medio año; el 24,9% creen que es igual y sólo el 12,7% señalan que es mejor. En cuanto a la situación de los hogares, el 45,5% dicen que viven peor que hace seis y meses, frente al 8,1% que ahora están mejor.
Respecto de las oportunidades que ofrece el mercado de trabajo, para el 60% hoy es más complicado encontrar empleo que seis meses atras, frente al 27,4% que consideran que es igual de difícil y un 8,4% que dicen que ahora es peor.
De cara al futuro, casi el 40% de las personas preguntadas estiman que dentro de seis meses encontrar un empleo será aún más difícil que ahora. Casi otro 30% aventuran que será más fácil, y hay un 21% que no esperan cambios a mejor ni a peor.
Sobre el conjunto de la economía, el 41,3% pronostican que dentro de seis meses estará peor; hay un 30% que esperan mejoras y un 22,1% que dicen que se mantendrá igual.
En cuanto al consumo, el 58,1% de los encuestados sienten que el año próximo tendrán las mismas posibilidades de adquirir bienes duraderos (coches, muebles, electrodomésticos, ordenadores...) frente al 28,3% que creen que serán menores. Sin embargo, el 95,6% responden con un 'no' a la pregunta de si se plantean comprar una vivienda en 2014, frente al 3,8% que dicen que sí.