#Lafieracorrupia

La fiera corrupia es un animal mitológico, celtíbero, que aterrorizaba a aquellas gentes en su ignorancia. Se le describía como «un animal monstruoso. Como un gato lleno de uñas, con cabeza de serpiente y ojos grandes de lechuza». Supongo que en la oscuridad de aquellos tiempos cuando un asesinato era lo suficientemente horrible como para atribuírselo a un ser humano culpaban a esta bestia.

No he podido dejar de pensar que la fiera corrupia existe al ver al asesino de Olguita Sangrador salir de la cárcel. Tampoco he podido dejar de pensar en esa bestia al ver salir de la cárcel a otro asesino, violador y torturador. En este caso el de Miriam, Toñi y Desiré. Las niñas de Alcaser.

Y no han sido los únicos. Esta semana han salido mas de 20 asesinos, miembros destacados de la peor escoria de la humanidad.

España, el país de las libertades y los derechos, ha cometido el mayor pecado que puede cometer una nación. No proteger a sus ciudadanos de los malechores.

Este pecado no es mas que la consecuencia de la acumulación de dos factores. Por un lado el irresoluble problema de la justicia española. Una justicia lentísima, aunque en este caso haya actuado con la rapidez de rayo. Y por otro unos políticos que en este caso se han vuelto a cubrir de gloria. Que le digan a la madre de Olga o a las de las niñas de Alcaser que en el país de los ERE, de los sobres en negro, de las mariscadas de UGT, de Urdangarin, del 3% de Cataluña, de Fabra y Pepiño Blanco, los políticos no pueden hacer nada para que los asesinos no salgan a las calles.

Si alguno de estos asesinos fuese a vivir a casa de alguno de los jueces que los han soltado ¿se lo hubiesen pensado dos veces? Quiero pensar que no.

Presiento que esta historia va a terminar en sangre. La de alguna nueva víctima, Dios no lo olvide. O la de alguno de los asesinos linchado a manos de algún familiar, Dios no lo deje de olvidar.

España ya era un paraíso de chorizos, pero lo hemos convertido en el cielo de los asesinos.