Exetarras y víctimas recuerdan juntos a un asesinado por ETA
BILBAO.Actualizado:El calendario quiso que ayer coincidieran dos actos en recuerdo a víctimas de ETA que comenzaron a dibujar un boceto de lo que puede ser el cuadro de la futura convivencia en un País Vasco en paz. Presos y expresos críticos con la violencia de la banda y familiares de víctimas de ETA, los GAL, la ultraderecha o el franquismo se reunieron en Bilbao en el homenaje al sargento de la Ertzaintza asesinado Joseba Goikoetxea. Casi a la misma hora, en Vitoria, un preso de la vía Nanclares desmarcado del terrorismo y recién excarcelado tras la abolición de la doctrina Parot, Iñaki Rekarte, participó en un seminario en recuerdo del asesinado Fernando Buesa. Sentada a su lado estaban Natividad Rodríguez, viuda del dirigente del PSE alavés. Dos convocatorias en principio inconexas convergieron para proyectar una pequeña luz de esperanza.
El acto más numeroso fue el que conmemoró en la capital vizcaína el vigésimo aniversario de la muerte del sargento mayor de la Policía vasca y militante del PNV Joseba Goikoetxea, que reunió a dirigentes políticos del PNV, EH Bildu y PSE-EE -faltaron PP y UPyD-, y a víctimas de las distintas violencias. Pero sobre todo dejó una imagen inédita, la de una víctima del terrorismo, la viuda del ertzaina, Rosa Rodero, saludando a una presa, Carmen Gisasola, exdirigente de ETA y crítica ahora con la violencia, que se acercó al homenaje aprovechando un permiso penitenciario. Se da la circunstancia de que en su día Gisasola estuvo a punto de ser detenida por la unidad antiterrorista que dirigía Goikoetxea, que en 1993 fue asesinado a tiros.
Rodero también saludó a otro miembro de la vía Nanclares, Andoni Alza, excarcelado la semana pasada tras la abolición de la doctrina Parot. La víspera, la viuda había expresado su intención de dar la bienvenida al homenaje incluso a presos recién excarcelados, si reconocían el daño causado.
«Todos somos víctimas»
La esposa de Goikoetxea, visiblemente emocionada, también insistió en la necesidad de que se reconozca a todas las víctimas, «sean de donde sean, todas somos víctimas». Por ello, la viuda del ertzaina saludo cariñosamente a Edurne Brouard, hija del dirigente de HB asesinado por los GAL Santiago Brouard; a Axun Lasa y Pili Zabala, hermanas de los dos presuntos miembros de ETA secuestrados, desaparecidos y asesinados por los GAL; o a Mikel Paredes, hermano de 'Txiki', miembro de ETA fusilado en el franquismo junto a Ángel Otaegi. También acudieron víctimas de ETA como Cristina Sagarzazu, viuda del ertzaina Montxo Doral, o un hermano del psicólogo de la cárcel de Martutene Javier Gómez Elósegui.
El homenaje congregó a centenares de personas, una cifra inusualmente elevada que contrasta con la asistencia a otros actos en recuerdo de otras víctimas, o la propia conmemoración anual del Día de la Memoria.