El fiscal general investigará el uso de cuchillas en la valla de Melilla

El fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, ordenó abrir una investigación sobre la colocación de cuchillas en la valla que separa Melilla con Marruecos. Para el máximo responsable del Ministerio Público esta medida, que según el Gobierno tiene un objetivo disuasorio frente a los asaltos masivos a la verja, no es un procedimiento ajustado al derecho ni, incluso, «de estricta humanidad». Así lo manifestó ayer Torres-Dulce durante una comparecencia ante la Comisión de Justicia del Congreso al ser cuestionado por el diputado de ERC Joan Tardá. «Esto es tan indignante, tan vergonzoso que me gustaría que, al igual que sale raudo y veloz a poner en bandeja de plata a la Casa Real la salida de escape de la infanta, dijese que las cuchillas instaladas en la verja de Melilla le provocan una gran indignación», reto Tardá a Torres-Dulce.

Las críticas del fiscal general vienen a sumarse a las muchas pronunciadas ya ante la decisión del Gobierno de colocar estas cuchillas, que fueron retiradas en 2007 debido a las graves heridas que produjeron a decenas de subsaharianos indocumentados que intentaron traspasar al asalto la valla que delimita la ciudad autónoma y Marruecos.

El PSOE instó a los diputados populares a votar su propuesta que se votará hoy en el Congreso para que el Gobierno dé marcha atrás en su decisión de volver a colocar las cuchillas. Además, UPyD anunció que denunciará la iniciativa ante la Comisión Europea al tratarse de «una medida lesiva que atenta gravemente contra la vida de las personas».

La semana pasada la defensora del Pueblo, Soledad Becerril, ya censuró la decisión del Ejecutivo, a la que definió como «una barbaridad que puede producir algún desgraciadísimo accidente».