Las trabajadoras de la empresa Claros, en huelga indefinida por impagos
Las empleadas, que prestan el Servicio de Asistencia a Domicilio, no han cobrado aún la nómina del mes de octubre
EL PUERTO.Actualizado:Las trabajadoras del Servicio de Ayuda a Domicilio de la empresa Claros se manifestaron en el día de ayer frente al Consistorio de la plaza Isaac Peral, tal y como anunció días antes el Comité de Empresa. El motivo es el impago de la nómina del mes de octubre y los continuos retrasos que sufren en el cobro de éstas.
Por parte de la empresa no se ha dado ninguna fecha de pago y la respuesta que se les ofrece es que las administraciones no le abonan los servicios y por ese motivo no tienen liquidez, algo que no entienden las trabajadoras ya que se les ha informado por parte de distintas Áreas del Ayuntamiento que el abono de la cuantía se ha realizado.
La plantilla decidió, el pasado viernes, por medio de una asamblea, que se llevaría a cabo una huelga indefinida, tal y como detalla Carmen López, presidenta del Comité de Empresa. «Mes tras mes sufrimos retrasos en los pagos y lo único que nos comenta la empresa es que no tiene liquidez, así que por ese motivo nos reunimos y se decidió hacer una huelga indefinida con un parón de 9 a 12 de la mañana», destaca López.
López lamenta la poca implicación por parte del Consistorio, «nos sentimos muy disgustadas porque por parte del Ayuntamiento no hay nadie que se implique y le pida responsabilidades a la empresa, ya hasta dudamos de que se haya hecho el pago que dicen».
Estos retrasos e impagos afectan a la vida de los trabajadores, «los compañeros y yo estamos indignados, dentro de la plantilla hay personas que han tenido que pedir dinero para poder pagar las facturas de luz. Además de cobrar mediante un contrato por horas nos retrasan los pagos, así es imposible».
La presidenta del comité también hace referencia a la precariedad laboral que padecen, «al contrato laboral por horas que tenemos y a que lo poco que ganamos es porque somos mujeres, si fuéramos hombres, otro gallo cantaría».
Las trabajadores lamentan que los perjudicados también sean los usuarios, «lo que más nos duele son las personas que usan el servicio que se quedan sin que se les cuide o se les lave debido a la pasividad de los políticos que no dan la cara y preguntan cuáal es la causa para que no se pague», concluye Carmen.