El 'violador del ascensor' fija su domicilio en Valladolid
Pedro Luis Gallego recuperó el jueves la total libertad de movimientos | El Ministerio del Interior insiste en que en que no puede controlarle
VALLADOLIDActualizado:El máximo responsable de Instituciones Penitenciarias, Ángel Yuste, calificó de «reliquia jurídica» el macanismo de redención de penas de 1973, ya derogado, que no solo permitió que el 'violador del ascensor', Pedro Luis Gallego, recuperara el jueves la libertad «total de movimientos» sino que le protege también en adelante de cualquier posible vigilancia policial desde que puso su primer pie en la calle a su salida de la prisión madrileña de Alcalá Meco después de saldar su deuda legal con la Justicia.
Así que, ¿dónde está ahora el doble asesino y violador múltiple vallisoletano? Pues lo único que se sabe a ciencia cierta es que el domicilio oficial de Pedro Luis Gallego, al menos a efectos de notificaciones, se encuentra en la capital vallisoletana. Eso, al menos, es lo que él mismo comunicó al centro penitenciario antes de recuperar la libertad. Allí recibirá, como mínimo, sus cartas. En cuanto a su paradero actual, dado que se trata de un «ciudadano libre», según inciden fuentes policiales, solo se sabe que pasó sus primeras horas en Madrid, una ciudad en la que en su día llegó a tener pareja y en la que, según distintas fuentes, aún mantiene una relación.
Y partir de ahí, es decir, desde ayer mismo, Pedro Luis Gallego pudo y puede desplazarse a la ciudad que elija, incluida la suya natal y en la que tiene su domicilio oficial, sin más restricciones que las de su conciencia. Así lo reconocía ayer la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría –vallisoletana y conocedora, por tanto, del pánico que causó el violador en la ciudad en los años ochenta y noventa–, quien matizó, eso sí, que «Interior tiene la obligación de garantizar la seguridad ciudadana» y anticipó, sin concretar nada más, que «todos los mecanismos que pueda utilizar se van a utilizar». El problema es que entre estos mecanismos no se encuentra la libertad vigilada, una figura creada hace apenas tres años y que, al igual que la doctrina Parot, no puede aplicarse de manera retroactiva a los delincuentes condenados por el viejo Código Penal de 1973, según aclaró el secretario general de Instituciones Penitenciarias.
Víctimas potenciales
El propio responsable del sistema de prisiones, Ángel Yuste, calificó de «lógica» la preocupación que ha generado en la sociedad la liberación, entre otros, del 'violador del ascensor' o del 'violador del portal', Pablo García Ribado, que fue condenado a la friolera de 1.721 años de cárcel por 80 violaciones y también abandonó la cárcel este jueves. «Comprendo la preocupación de los ciudadanos como potenciales víctimas de estos delincuentes porque no hay posibilidad de controlarles», concretó. Eso salvo que cualquiera de ellos cometiera de nuevo, como temen los expertos, algún nuevo delito.
Y esto último es lo que más le preocupa también al padre de la joven Leticia Lebrato, la última víctima mortal de Pedro Luis Gallego, que ayer rompió su silencio en el programa Espejo Público de Antena 3 para vaticinar que Pedro Luis Gallego, que hoy cuenta con 53 años, volverá «a robar y violar como hacía y como hizo con mi hija en cuanto se le acabe el dinero que tenga». Pablo Lebrato recordó que el asesino abordó aquella fatídica tarde del 19 de julio de 1992 a su hija, de 17 años, en Viana de Cega y lamentó que «tuvo unos últimos momentos horribles por no dejarse violar –recibió once puñaladas–». Luego, añadió, «le robó lo poco que llevaba encima, unos pendientes y una sortija, ya que iba camino de la piscina».
"Una bomba asesina"
El padre de la joven vallisoletana reconoció que no es capaz de perdonar al violador múltiple y mostró, eso sí, su admiración por Pilar Rodríguez, la madre de su otra víctima mortal (la burgalesa Marta Obregón), por «haber podido perdonarle después de lo que le han hecho».
Ni los progenitores de Leticia Lebrato ni su abogado comparecieron ayer, como ya anunciaron el jueves, ante la Audiencia Provincial al considerar «una broma pesada» la citación que recibieron ese día por parte del mismo tribunal burgalés que acababa de liberar al 'violador del ascensor', un exrecluso al que la presidenta de la asociación de víctimas Clara Campoamor, Blanca Estrella Ruiz, volvió a calificar ayer de «bomba asesina y violadora de matar».
Pero nada puede hacerse para controlar a un Pedro Luis Gallego que a las ocho en punto de la tarde del jueves, y sin nadie que le esperara, regresó a la sociedad con su deuda de 273 años de prisión saldada después de permanecer apenas 21 entre rejas por los asesinatos de las jóvenes Leticia y Marta y 18 violaciones más.
«Ojalá las medidas para renovar el Código Penal de 1973 se hubieran adoptado antes, pero haremos lo posible para blindar la situación», reiteró la vicepresidenta del Gobierno. Esas medidas, en cualquier caso, nunca afectarán a Pedro Luis Gallego.