Arranca el juicio contra el expresidente alemán Christian Wulff
El antiguo jefe de Estado está procesado por tráfico de influencias al aceptar regalos y prebendas durante su mandato
BERLÍNActualizado:El expresidente alemán Christian Wulff, deberá responder desde hoy a las acusaciones de tráfico de influencias que le han convertido en el primer jefe de Estado sometido a juicio en la historia de Alemania.
Los jueces deberán determinar si el antiguo dirigente, de 54 años, se benefició indebidamente de la generosidad de un productor de cine, amigo íntimo de Wulff, quien pagó su estancia en un hotel así como una factura en la fiesta de le cerveza de Múnich, hasta completar un total de 700 euros. El juicio prevé 22 jornadas de audiencia, que se prolongarán hasta abril de 2014, y la comparecencia de una cuarentena de testigos.
La llegada del expresidente al tribunal de Hanóver se produjo poco antes de las nueve de la mañana, ante una multitud de periodistas. "No es un día fácil. Espero deshacerme de la última acusación que queda porque siempre me he comportado convenientemente", declaró antes de entrar al Palacio de Justicia.
Wulff se vio obligado a dimitir en febrero de 2012 después de que la justicia le retirara la inmunidad ante las sospechas de corrupción. Las primeras informaciones publicadas en la prensa revelaban la concesión de un préstamo en condiciones especialmente favorables acordada para la compra de un bien inmobiliario cuando era presidente del Estado-región de Baja Sajonia, entre 2003 y 2010.
En meses posteriores, se multiplicaron las informaciones relativas a privilegios y prebendas disfrutados por el entonces jefe de Estado. Finalmente, la justicia ofreció a Wulff un acuerdo con el reconocimiento de su culpabilidad y el pago de 20.000 euros de multa. El que fuera candidato a suceder a Angela Merkel a la cabeza del partido conservador rechazó la oferta y prefirió defender su honor en un juicio público.