Los concesionarios creen que lo peor para la automoción «ya ha acabado»
La patronal del sector, Faconauto, espera que este año se cierre con 715.000 matriculaciones, que se elevarían hasta las 800.000 en 2014
MADRID. Actualizado: GuardarLos concesionarios creen que lo peor de la crisis ha pasado, al menos en lo que a la automoción respecta. Tras perder desde 2007 aproximadamente el 19% de los puntos de venta, y de «tocar fondo» antes del pasado verano, el sector espera una paulatina recuperación de las ventas, de forma que el presente ejercicio termine con aproximadamente 715.000 matriculaciones de turismos y todoterrenos (en 2012 fueron 699.000). Así lo manifestó Jaume Roura, presidente de la patronal Faconauto, en el transcurso del XXII Congreso Nacional de la Distribución de la Automoción que se celebra en Madrid. Roura prevé que en 2014 se alcancen las 800.000 unidades vendidas y que en el periodo 2015-2020 se llegue a 1.200.000, «que es una cifra que le corresponde a España por PIB y renta per capita». El máximo responsable de Faconauto se mostró convencido de que «entre todos levantaremos el mercado», pero principalmente de mano de las marcas, «que son los principales inductores de la fabricación». «Sin gallina (fabricantes) no hay huevos (concesionarios)», ilustró.
En su opinión, después de una «larga travesía del desierto» el sector empieza «a visionar el oasis», aunque ha lamentado que «muchos se hayan quedado en el camino». Roura asegura que, si algo positivo ha dejado este periodo de crisis, ha sido la reorganización interna del sector, «quizá sobredimensionado». Además, los concesionarios «en su mayoría empresas familiares, han mejorado procesos y reducido gastos». «Ahora estamos preparados para afrontar lo que viene y para dejar a nuestros sucesores empresas rentables, sólidas y viables», sentenció.
Mejorar la posventa
Entre los retos concretos a los que debe hacer frente el sector de forma inmediata, el presidente de la Faconauto citó la necesidad de adaptar el servicio postventa a la nuevas tecnologías. Un negocio «que ha caído enormemente» a causa de la mayor fiabilidad de los nuevos modelos de coches, y a la propia crisis, que ha reducido la entrada de coches viejos en los talleres de los concesionarios.
Roura agradeció el impulso que para el sector de la automoción han supuesto los distintos planes de incentivos articulados por el Gobierno (PIVE, Pima AIRE), y ha expresado la intención de Faconauto de luchar «para que en 2014 se mantengan y nos permitan consolidar la recuperación del mercado, que tanto necesitamos». El Ejecutivo ha reiterado en numerosas ocasiones su disposición a prolongar en el tiempo este tipo de ayudas, que antes de la puesta en marcha del PIVE 3 acumulaban 365 millones.
El presidente de la CEOE, Joan Rosell, destacó por su parte que los concesionarios de automóviles en España tuvieron que hacer frente a una reestructuración «tremenda» de sus negocios para amoldarse a la realidad comercial generada por la crisis económica.