«De ser cierto el espionaje resultaría inaceptable»
Rajoy anuncia la comparecencia en el Congreso del director del CNI para que dé explicaciones por las escuchas de la NSA
MADRIDActualizado:El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha defendido esta mañana en el Congreso los pasos dados por España desde que se dio a conocer la interceptación masiva de llamadas y correos electrónicos a ciudadanos europeos por parte de los servicios secretos estadounidenses.
El jefe del Ejecutivo ha asegurado que “de ser cierto el espionaje sería inaceptable” aunque ha insistido en que antes de adoptar una decisión más allá de solicitar explicaciones al embajador de EE UU debe clarificarse lo que ha sucedido.
Pese a la insistencia de los portavoces de la oposición, Rajoy no ha ofrecido datos acerca del alcance del espionaje. Así, ha eludido responder a preguntas como si ha existido participación de los servicios secretos españoles en la interceptación de datos o si millones de españoles han sido espiados.
Las explicaciones las ofrecerá a puerta cerrada ante la Comisión de Secretos Oficiales del Congreso el director del CNI, general Félix Sanz. Rajoy ha anunciado esta comparecencia con el fin de poner a los grupos al corriente de la información que obra en poder del Gobierno sobre un caso que ha desencadenado una tormenta política en toda Europa y dejado maltrechas las relaciones entre EE UU y la Unión Europea.
De la desconfianza al servilismo
El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha pasado de puntillas sobre el espionaje de la NSA y se ha limitado a resaltar la desconfianza que estas actuaciones causan entre países aliados. La posición socialista ha sido aplaudida por el presidente que la ha calificado como “equilibrada”.
Más beligerantes se han mostrado el resto de grupos. Desde la Izquierda Plural Cayo Lara ha acusado al Ejecutivo de mantener una política de servilismo y ha abogado por exigir al presidente Barack Obama que EE UU asuma responsabilidades políticas y penales. A nivel nacional, el coordinador general de IU ha recordado que en 1995 el vicepresidente, Narcís Serra, y el ministro de Defensa, Julián García Vargas, se vieron a obligados a dimitir tras destaparse escuchas ilegales realizadas por el entonces CESID. El jefe del Ejecutivo ha recurrido a la ironía en su respuesta a Lara: “Da la sensación de que lo sabe y tiene pruebas de todo. No puedo más que felicitarle porque yo no”.
Desde UPyD se ha solicitado además de la comparecencia del general Sanz la de la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, responsable política del CNI. “Creo que con el director del CNI es suficiente”, le ha respondido Rajoy.
A modo de conclusión el presidente del Gobierno ha señalado a Lara y Díez que manejará este escándalo con una receta que ha venido repitiendo desde que asumió el cargo hace dos años: “Sensatez”.