«El Tajo del Águila es un magnífico tesoro escondido entre dos parques naturales»

Juan de los Ríos cuenta con una gran experiencia en el sector hotelero, pese a su juventud, y desde 2011 es el director del complejo que Hoteles Andaluces con Encanto gestiona en Algar, el Tajo del Águila.

-¿Cómo definiría el Tajo del Águila?

-Como dice nuestro eslogan, es un Paraíso Natural. No obstante, además, nuestra gastronomía y turismo activo son virtudes a destacar del complejo rural y su entorno. Nos encontramos ante un magnífico tesoro escondido entre dos parques naturales y a las puertas de la serranía gaditana.

-¿Qué le puede ofrecer esta instalación a los clientes?

-Lo mejor del Tajo del Águila es su versatilidad y capacidad camaleónica de adaptarse a cualquier cliente para que encuentre lo que busca. Nos adaptamos a lo que ellos necesiten y, además, al tratarse de un complejo grande, los distintos tipos de clientes conviven sin interferencias entre ellos. En la zona se respira aire puro y tranquilidad por los cuatro costados.

-¿Observan sorpresa en los clientes que conocen este lugar?

-Sin duda, la gran mayoría queda sorprendido por el entorno, en especial por las vistas espectaculares. También causan furor las idílicas puestas de sol y el cielo repleto de estrellas que se pueden contemplar muchas noches.

-¿Por qué HACE ha puesto los ojos en este rinconcito de la provincia?

-Con seguridad, debido al gran potencial de este lugar, por su magia. Hoteles Andaluces con Encanto sólo gestiona establecimientos en destinos estratégicos, y aquí de hecho se refleja, además haciendo honor a su nombre.

-¿Cómo busca el Tajo del Águila contentar a los clientes que os visitan?

-Para nosotros es vital que el cliente se sienta como en casa, por lo que proporcionamos un trato familiar y personal. Intentamos ofrecerles distintos y atractivos planes de ocio, aunque hay quien busca tranquilidad. La piscina y el Guadalcacín son grandes alicientes. Aquí se puede disfrutar desde un gran día de pesca, hasta un paseo en canoa, hidropedales o velero. Pueden ver pequeñas cuevas, la cascada que emana del manantial de Tempul o parar en la playita a tomar un picnic o a refrescarse con un buen chapuzón en el embalse.

-¿Cuál es el futuro del complejo?

-Por ahora, seguir en la línea de fidelizar clientes a base de proporcionar experiencias y sensaciones diferentes. Queremos confeccionar nuevas temáticas y ampliar nuestra oferta de turismo activo. Por ejemplo, vamos a estrenar la tirolina más grande de la provincia y tratamos de abrir el abanico de posibilidades del Guadalcacín, ofreciendo turismo náuticos, sin olvidarnos del cielo, donde hay grandes oportunidades para las actividades.

-¿Y en cuanto a instalaciones?

Tras la inauguración de la hospedería rural el año pasado, esperamos contar a medio plazo con más casas o el hotel de cuatro estrellas que está proyectado. Sin duda, albergamos potencial para llegar a convertirnos en un destino afamado a nivel internacional para el turismo de naturaleza y deportivo, siempre de un modo sostenible.