PERFIL En retirada, pero no retirado
Actualizado:Aunque nunca fue engolado ni distante, al quitarse lo que él mismo llama «el manto del poder» Manuel Chaves se ha vuelto más cercano y charlador. Cuatro años después de dejar la presidencia de la Junta de Andalucía, que ocupó durante 19 años, está de nuevo solicitadísimo por los medios informativos. Su palabra es escuchada con respeto por sus compañeros del Congreso y esperada con interés en su tierra, donde ahora multiplica su actividad una vez cerrada la salida de José Antonio Griñán, a quien él mismo eligió sucesor y con quien terminó por romper relaciones. También en su partido, sobre el que aún planea su «larga sombra», por usar sus propias palabras. El expresidente asegura que nunca volverá a ocupar ya ningún puesto, ni nacional ni regional y se dice «en retirada, pero no retirado» de la política, que es para él no sólo una pasión, sino una seña de identidad. «Soy político», admite, como si no lo demostrara el cuidado con el que llega a la cita, con notas manuscritas en papel del Congreso o la cintura con que encaja las preguntas difíciles. Un político de raza, de oficio y de instinto que da la impresión de que ya sólo espera ocupar el papel de «referente» para el que le avala su trayectoria. Aparte de disfrutar del cine con sus nietas.