La oposición exige la salida de El-Asad antes de negociar
El enfado de Arabia Saudí con Estados Unidos por su acercamiento a Irán divide a los rebeldes y a los Amigos de Siria
Actualizado: GuardarA falta de un mes para la conferencia de paz los llamados Amigos de Siria son incapaces de unir a la oposición política siria para que se siente frente a los enviados de Bashar el-Asad en la cita que tendrá lugar en Ginebra. Londres fue escenario de un nuevo intento por parte de los once países que respaldan a la Coalición Nacional de Fuerzas de la Oposición y la Revolución Siria (CNFORS), principal órgano opositor en el exilio, de mostrar la necesidad de tomar parte en la negociación.
El auge de los grupos islamistas, setenta de los cuales ya han manifestado de forma pública que no reconocen al CNFORS, y los nuevos aires de cambio en Irán, gran aliado regional de Damasco, han llevado a Alemania, Reino Unido, Francia, Italia, Estados Unidos, Arabia Saudí, Emiratos Árabes, Jordania, Egipto y Turquía, integrantes del grupo de Amigos de Siria, a intentar acelerar el proceso. La primera medida para convencer a la oposición fue acceder a la principal exigencia del CNFORS y dejar «claro» que «Bashar el-Asad no tendrá ningún papel en una Siria pacífica y democrática», declaró William Hague, responsable de Exteriores británico, al finalizar el encuentro.
Rusia presiona a Damasco y Bashar el-Asad ya ha adelantado en sus múltiples entrevistas de las últimas semanas que «estamos preparados para el diálogo sin condiciones previas», pero Estados Unidos no es capaz de unir a una oposición fragmentada en el plano político y más aún en el militar, que se niega a tomar parte en una conferencia de paz hasta que le garanticen la salida de El-Asad porque «Ginebra no tendrá éxito y nosotros no podemos participar si permite a El-Asad ganar tiempo para derramar la sangre del pueblo mientras el mundo se limita a mirar», señaló el líder opositor Ahmed Jarba.
El CNFORS discutirá a comienzos de noviembre su participación, pero el Consejo Nacional Sirio (CNS), el grupo más importantes en el seno de la coalición, ya ha advertido de que abandonará la organización si decide participar en la cumbre.