México también censura a EE UU por interceptar los correos del expresidente Calderón
El Ejecutivo condena la intromisión de la NSA, que intervino también el móvil del actual mandatario cuando era candidato
LA HABANA.Actualizado:El Gobierno mexicano expresó ayer su «categórica» condena tras las nuevas filtraciones de que EE UU espió en mayo de 2010 el correo electrónico del entonces presidente Felipe Calderón, utilizando el mismo sistema de intercepción de comunicaciones que su Ejecutivo autorizó que se instalara en el país tres años antes. Washington se apropió de más de 85.000 mensajes en 2012, entre ellos del actual mandatario, Enrique Peña Nieto.
El Ministerio de Relaciones Exteriores difundió un comunicado para protestar por «la violación de la privacidad de las comunicaciones de instituciones y ciudadanos» por parte de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) de EE UU. «Esta práctica es inaceptable, ilegítima y contraria al derecho mexicano y al derecho internacional», denunciaron. La queja se produjo después de que la publicación alemana Der Spiegel difundiera el domingo filtraciones del exinformático de la CIA Edward Snowden, refugiado actualmente en Rusia tras recibir asilo político del Kremlin por un año.
Plan de cooperación
El proyecto para 'hackear' los correos electrónicos de Calderón, denominado Flat Liquid, fue autorizado por personal de alto rango de la NSA. Se da la circunstancia de que en el 2007 el propio exmandatario permitió a Washington instalar dentro de la Iniciativa Mérida -el plan de cooperación binacional para luchar contra el narcotráfico- un sistema de intercepción de comunicaciones telefónicas y por medio de internet.
La cancillería denuncia que EE UU no respetó «los apoyos» de la Administración de Calderón. Pero además en el 2012, a través del mismo procedimiento, la NSA intervino el teléfono móvil del entonces candidato presidencial Peña Nieto, para obtener ventajas en temas de comunicaciones diplomáticas, económicas y de inversiones, y proporcionar a Washington información sobre el sistema político y la estabilidad interna del país.
Peña Nieto, en su reciente encuentro con el mandatario norteamericano, Barack Obama, exigió una investigación exhaustiva sobre el supuesto espionaje perpetrado por la NSA. El jefe de la Casa Blanca, por su parte, se comprometió a dar respuestas a sus vecinos del sur del continente.