¿Ni las gracias?

El Cádiz no juega el próximo fin de semana. Que por qué se preguntará usted, si no lo sabe ya. Pues por la roja, que de ‘roja’ tiene poco, por cierto.

A los desinformados–un servidor lo estuvo hasta hace bien poco–, se les recuerda que la selección española que dirige el marqués Vicente del Bosque juega en el Carlos Belmonte, próximo escenario del Cádiz, el martes 15 de octubre. Sí, sí, el martes 15 de octubre y por la noche. Ni el sábado ni el domingo próximo. Sí, sí, sí..., Y jugará tan sólo un día antes que el duelo estrella de la próxima jornada del grupo IV. En el mismo estadio, en el mismo césped, en los mismos vestuarios... Y es que en el fútbol, como en la vida, siempre hubo clases.

No diré yo que haya que hacer de esto un cisma ni nada por el estilo. Los campeones del mundo deben y tienen que jugar sobre alfombras y punto. Pero qué menos que al Cádiz, principal damnificado del partido internacional, se le dé algo más que las gracias. Que a día de hoy se desconoce si se las han dado. Poco importa que el césped del Carlos Belmonte esté recién pisoteado por los mejores jugadores del mundo. Decir eso suena a coña si se echa un vistazo a campitos como los del Lucena, Cacereño y demás patatales que se tienen que visitar cuando se juega en las catacumbas del fútbol español. Pero que menos que un ‘algo’ para un equipo, el Cádiz, que por la cara jugará dos partidos en cuatro días sin recibir compensación alguna. Porque imagino que la Federación tendrá un detalle (económico) con el equipo anfitrión del compromiso internacional pero..., ¿y al ‘pardo’ que se le hace viajar entre semana y tiene que volver por carretera en la misma noche del partido para preparar otro choque liguero en casa a los tres días? ¿A ese?, ¿a ese qué? ¿Las gracias y un cachete en la cara nada más? Que chungo ‘io’. ¿Así estamos? Vaya tela.

Si al menos esta visita a La Mancha en condiciones discutibles sirviera para que la Federación y sus árbitros respetasen un poco más al Cádiz en los campos...