Es noticia:
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizCádiz
Un agente de la Guardia Civil inspeccionaba ayer la plataforma del proyecto Castor frente a las costas de Vinaròs (Castellón). :: GUARDIA CIVIL
Sociedad

Los expertos no descartan más seísmos y de mayor intensidad

La Guardia Civil comprueba la actividad en la plataforma de gas Castor después de que la Fiscalía de Castellón abriera una investigación

Actualizado:

Los expertos no descartan seísmos «significativos» de mayor intensidad que los registrados hasta ahora -el máximo es de 4,2 grados en la escala Richter- en el Golfo de Valencia causados previsiblemente por el proyecto Castor de almacenamiento de gas, aunque reconocen que lo normal es que tanto su intensidad como su periodicidad «irán decayendo», según informaron ayer fuentes del Ministerio de Industria.

Los informes preliminares de los expertos también confirman una relación «temporal» y «espacial» entre la inyección de gas en el almacén Castor y los terremotos que se han producido frente a las costas de Castellón y Tarragona. Además, según estas primeras evaluaciones, los técnicos han podido detectar por la profundidad de los seísmos que las fallas afectadas son «normales y «secundarias». «Lo que sabemos es que son fallas pequeñas, como demuestra el hecho de que los seísmos han sido de pequeña magnitud», insisten las mismas fuentes.

Los técnicos centran ahora sus esfuerzos en identificar los epicentros de los terremotos, un dato fundamental porque «ayudará a conocer el foco o la causa que podría haber generado estos procesos». Y es que los sismógrafos actuales están demasiado lejos de la plataforma marina y no pueden captar con precisión la ubicación de estos temblores. Para subsanar este problema el Instituto Geológico Minero tiene previsto instalar este fin de semana un sismógrafo en las islas Columbretes, mucho más cerca de la polémica plataforma.

«En general, cuando se da un almacenamiento de esas características se producen movimientos significativos y sismicidad inducida», insisten los técnicos, que también reconocen que los temblores continuarán durante varias semanas más a pesar de que las operaciones en el almacén hayan cesado: «Cuando se produce una deformación en el terreno tarda un tiempo en acomodarse».

Por su parte, el Ministerio asegura que actuó con la mayor diligencia desde que la empresa Escal informó al Gobierno por primera vez de los temblores el 10 de septiembre. El Observatorio Geográfico del Ebro había detectado unos días antes temblores inferiores a 1,5 grados. El 24 se produjo el primer gran terremoto, de 3,6 grados, y dos días después, el 26, el Gobierno mandó paralizar las actividades. Unas operaciones que desde el Ejecutivo insisten en que no se reanudarán hasta garantizar el cien por cien de la seguridad.

En cualquier caso el ministro de Industria, José Manuel Soria, insistió ayer que «no es probable» que se produzcan movimientos sísmicos «relevantes». No obstante, aseguró que «el Gobierno está preparado para actuar ante cualquier tipo de situación». Soria recordó que las comunidades autónomas afectadas, Comunidad Valenciana y Cataluña, han activado sus respectivos planes de sismicidad «en el nivel más bajo existente», el cero, lo que responde a que, «en opinión de los técnicos, la situación no es preocupante».

Desde el Ejecutivo también destacaron la colaboración de la empresa, que remite informes diarios al Gobierno. También confirmaron que el proyecto cumplió con todos los procedimientos requeridos a pesar de que no se realizó un estudio sísmico previo como solicitó el Observatorio del Ebro.

Repercusión económica

Otra de las dudas sobre el proyecto Castor, que supuso una inversión de 1.200 millones de euros, tiene que ver con las repercusiones económicas en caso de que se paralice definitivamente. Desde el Gobierno insisten en que permanecen a la espera de la auditoría externa que está analizando el proyecto y cuyo resultados deben conocerse este mes. Sin embargo, desde el ministerio reiteran que su prioridad ahora es la seguridad y no los aspectos económicos.

Mientras se producen los trabajos técnicos también han empezado las investigaciones judiciales. Así, un helicóptero de la Guardia Civil de Castellón aterrizó ayer por la tarde en la plataforma marina por orden de la Fiscalía Provincial de Castellón para comprobar si las actividades habían sido detenidas. Esta actuación se produce después de que la misma Fiscalía Provincial acordara incoar diligencias de investigación penal para esclarecer los múltiples seísmos que se están produciendo en el Golfo de Valencia. De hecho, ayer volvieron a registrarse nuevos temblores, el más importante alcanzó los 3,7 grados en la escala Richter.