Cory Monteith murió por un cóctel de alcohol y heroína

Cory Monteith murió de forma accidental. Es la conclusión final de los forenses encargados de investigar el fallecimiento del actor de la exitosa 'Glee'. El informe, que las autoridades de la ciudad de Vancouver hicieron público ayer, ha revelado que en la habitación de hotel en la que se descubrió su cadáver se halló una cuchara con restos de droga junto a una aguja hipodérmica usada. Monteith, de 31 años, se desvaneció tras ingerir una mezcla de heroína y alcohol.

El joven intérprete saltó a la fama como miembro destacado del reparto de 'Glee', una serie de tintes musicales que, desde su estreno en 2009, se ha convertido en todo un fenómeno social, especialmente entre el público más joven. Monteith había reconocido en repetidas ocasiones que desde su adolescencia mantenía una dura pugna con las drogas, que le llevó a ser internado, sin éxito, en varios centros de rehabilitación.

Fueron los empleados del hotel en el que se hospedaba quienes dieron con su cuerpo ya sin vida. Extrañados de que su inquilino no hubiera registrado su salida, como estaba previsto, el 13 de julio, decidieron acceder a la estancia. Allí yacía Monteith, tendido en el suelo sin consciencia, junto a dos botellas de champán vacías. Las cámaras de seguridad captaron su llegada, en solitario, en torno a las dos de la madrugada anterior.

El inesperado fallecimiento del actor ha vuelto a conmocionar al mundo del espectáculo, por desgracia acostumbrado a recibir, de cuando en cuando, noticias de este cariz. Los numerosos seguidores de 'Glee' pudieron rendirle un último homenaje gracias a un episodio que la serie dedicó a su memoria. Con su prematura desaparición, Cory Monteith pasa a engrosar la larga lista de estrellas del cine y la televisión con un desenlace trágico, en muchos casos, como los de Corey Haim, River Phoenix o, el más reciente, Heath Ledger, antes de alcanzar la treintena.