Economía da por superada la recesión y anuncia una recuperación «suave»

El Gobierno dio ayer por concluida la fase recesiva de la economía española y situó en 2014 una recuperación que será «suave». El Consejo de Ministros aprobó su proyecto de Presupuestos Generales del Estado para el año próximo sobre la base de un escenario más optimista que el esperado hace sólo cinco meses. El cuadro de predicciones macroeconómicas que acompaña a las cuentas estima un crecimiento del PIB del 0,7%, dos décimas superior al calculado en abril, y reduce ocho décimas, hasta el 25,9%, la tasa de paro prevista, además de pronosticar tímidos repuntes del consumo privado y la inversión. Pese a que la austeridad aún preside el gasto, Hacienda asegura que ha abierto la mano y permitido incrementos en partidas como I+D+i, vivienda, cultura y becas. Los detalles se conocerán el lunes, cuando el Gobierno presente las cuentas partida a partida.

La vicepresidenta del Ejecutivo, Soraya Sáenz de Santamaría, compareció junto a los ministros de Economía y de Hacienda, Luis de Guindos y Cristóbal Montoro, para escenificar la reedición en positivo de la rueda de prensa de abril, cuando en clave pesimista presentaron al país unas proyecciones que auguraban otro año de travesía del desierto. Ayer hubo tres mensajes repetidos hasta la saciedad: la recesión ha terminado y España se adentra en el crecimiento; en 2014 dejará de destruirse empleo y no habrá más subidas de impuestos porque el avance de la actividad permitirá ensanchar las bases imponibles sin infligir al contribuyente ningún golpe fiscal adicional.

Ese fue el tono general de una comparecencia en la que Montoro dijo hasta cinco veces que «no habrá nuevas subidas de impuestos» el año que viene, pero obvió que los incrementos fiscales ya han sido aprobados. La parte fundamental fue presentada al país el 26 de abril, cuando se aprobó la revisión del cuadro macroeconómico para su envío a la Comisión Europea junto al Plan Nacional de Reformas. Aquel día Montoro explicó que en 2014 los hogares deberán hacer frente a un aumento del IRPF equivalente a la subida «temporal» aprobada para 2012 y 2013 (el llamado 'gravamen complementario'), que debía expirar a finales de este año pero seguirá vienge el próximo. También anunció entonces los incrementos de impuestos sobre alcohol y tabaco, la supresión de deducciones a las empresas y los gravámenes «verdes» que fueron aprobados en junio.

Pero eso ya es historia. De cara al futuro, Luis de Guindos explicó que el PIB cerrará 2013 «todavía en tasa negativa» del 1,3%. Sin embargo, su departamento ha detectado «cierta recuperación» en los últimos meses, por lo que prevé que en el tercer y cuarto trimestres las tasas intertrimestrales ya serán positivas. «La fase recesiva ha finalizado y en el segundo semestre iremos a tasas suavemente positivas», explicó. Apoyó su afirmación en indicadores como la producción, la cifra de negocios y las entradas de pedidos en la industria, los índices de actividad del comercio, las exportaciones e indicadores financieros como la prima de riesgo, el aumento de los despósitos y el hecho de que la banca cada vez tenga que recurrir menos al BCE en busca de liquidez.

Estabilidad

«Se ha recuperado la estabilidad macro», zanjó De Guindos, para quien España abandonó técnicamente la recesión en este tercer trimestre. En cuanto a 2014, dijo que marcará un «punto de inflexión respecto a lo que hemos vivido desde 2008» y auguró creación de empleo neto en términos EPA, una reducción del endeudamiento frente al resto del mundo de 50.000 millones de euros y un ligero aumento del consumo privado (0,2%) y de la inversión(0,2%). Ese aumento de la formación bruta de capital será vigoroso en el sector de los bienes de equipo (2,7%), si bien continuará el ajuste de la inversión en construcción con una caída adicional del 1,7%.

La construcción será el gran lastre que provocará que la demanda nacional siga restando crecimiento al PIB (0,4 puntos). El consumo público recortará 2,9 enteros. El sector exterior, por su parte, aportará 1,2 puntos de crecimiento gracias a la pujanza de las exportaciones.

Pese a las mejoras esperadas, en 2014 el escenario de consolidación fiscal no cambia y mantiene intacto el objetido de déficit del 5,8% para el conjunto del sector público. Montoro aseguró que el Gobierno ha aprobado «el presupuesto de la recuperación económica que va a permitir abrir la puerta de la creación de empleo» gracias sobre todo al «esfuerzo en la contención del gasto».

Las cuentas prevén un incremento del gasto del Estado del 2,7%, hasta 133.259 millones, con un recorte del 4,7% en el gasto corriente de los ministerios. La partida destinada a pagar intereses de la deuda baja un 5,2%, hasta 36.590 millones, mientras crecen (19,8%) las aportaciones a la Seguridad Social (la partida para pensiones subirá un 4%), a los servicios públicos de empleo y las aportaciones a la CNMC.

Montoro presumió de que crecen los fondos para becas (21,5%); cultura (17,1%); vivienda (4,8%) e I+D+i (1,3%). Los detalles que permitirán certificar esas mejoras se conocerán el lunes, cuando el ministro presente los presupuestos tras entregarlos al Congreso de los Diputados para su tramitación. Por el lado de los ingresos, estima un incremento del 2,4% respecto de la recaudación prevista para el cierre de 2013.