España construirá la ampliación del aeropuerto afgano de Herat
Destinará junto a Italia entre tres y seis millones de euros y reformará el hospital de la base para apoyar la transición después de 2014
MADRIDActualizado:Poco a poco se empiezan a conocer los planes del Ministerio de Defensa para apoyar la transición en Afganistán tras finalizar la misión internacional en diciembre de 2014. De momento, todos los esfuerzos económicos se centrarán en Herat, la ciudad del oeste del país donde se acuartelarán los soldados españoles tras el cierre de la base de Qala-i-Nao, en la vecina provincia de Badghis.
El programa de inversión incluye la ampliación del aeropuerto internacional de Herat, ubicado junto a la base de apoyo avanzado, que se convertirá en uno de los aeródromos más importantes del país por su situación estratégica, cercanía con Irán y Turkmenistán
España e Italia, país que ostenta el mando regional oeste, ya han pedido a las autoridades afganas los permisos de obra y ahora están en la fase de licitación. La inversión será costeada por ambos aliados y oscilará entre tres y seis millones de euros, según anunció a finales de agosto el gobernador provincial Fazlullah Wahidi.
El único punto discordante es que el Gobierno de Kabul quería que los donantes pusieron el dinero y ellos se quedaran con la gestión de la obra a través de una subcontrata. Pero España e Italia se opusieron. Tras solventar este trámite, los trabajos de ampliación de la pista y la reforma de los accesos al aeropuerto, ubicado a 13 kilómetros de Herat, tiene previsto comenzar a mediados de otoño, según fuentes militares.
También se agrandará el hospital del acuartelamiento, conocido como Role 2, ya que cuenta con equipos quirúrgicos especializados. El centro está bajo tutela española y atiende a militares afganos, de la coalición y a civiles locales con vínculos con las tropas aliadas de la ISAF. La intención es dotar el centro médico de mayor capacidad de diagnóstico y cirugía y más camas de hospitalización.
Seguridad
La ampliación del aeropuerto internacional de Herat -el primer vuelo de prueba llegó antes de verano procedente de Emiratos Árabes- requerirá un esfuerzo añadido de seguridad. El Ministerio de Transportes afgano es el responsable de la parte civil del aeródromo y el encargado de dotar de seguridad los accesos y el interior del recinto.
Por su parte, los soldados españoles se ocupan de la vigilancia de la parte militar del aeropuerto, desde donde salen y llegan aviones de carga, sanitarios y de operaciones. En ese lugar se encuentran los hangares del Ejército del Aire.
Pues bien, para el nuevo cometido del aeródromo cívico-militar el Ejército Nacional Afgano ha pedido ayuda a los aliados para controlar los accesos, que ya han sido objetivo de la insurgencia en su campaña para malograr los avances del Gobierno de Kabul.
Si la ISAF da su beneplácito es probable que el país que asume esta seguridad se encargue también del perímetro de la base de Herat después del final de la misión en diciembre de 2014, según comentan fuentes militares en Afganistán. Hasta ahora, han sido los soldados italianos quienes se han encargado de este cometido. Pero no es descabellado pensar que España pase a ocupar esta tarea, lo que supondría un incremento de las tropas.
La idea inicial del Gobierno español era tener un contigente reducido de entre 200 y 300 hombres en Herat y los cuarteles generales de Kabul y Bagram a partir de 2015, dentro de la nueva fase de asesoramiento. Pero si se acaban asumiendo tareas como el perímetro de seguridad de la base o el apoyo en el aeropuerto se requerirá una presencia como mínimo de unos 450 soldados, calculan las mismas fuentes.