El cantante malagueño Pablo López, en una imagen promocional. :: L. V.
música

Pablo López estrena sus 'Once historias y un piano' en Cádiz

«Yo ahora mismo estoy muy satisfecho, pero por medio he tropezado muchas veces», confiesa el cantante malagueño

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El de Cádiz, en la playa Victoria y hace unos años, ha sido el concierto más multitudinario que recuerda haber ofrecido el cantante malagueño Pablo López. Entonces actuaba junto a sus compañeros de Operación Triunfo, un programa del que el joven resultó segundo finalista. Cinco años han pasado desde aquella noche y ahora López regresa a la capital gaditana en solitario, con su primer disco, 'Once historias y un piano' (Universal) recién salido al mercado. Sin duda, la mejor etapa de sus casi treinta años de vida. «Este es el momento en el que estoy viviendo mi profesión de una manera más intensa y real, he llegado a cumplir en estos últimos seis meses cosas que ni siquiera había soñado. Conocer a muchos artistas, grabar en estas condiciones, relacionarme a través de los medios y dar a conocer al mundo lo que soy capaz de hacer...», cuenta desde Barcelona, la última parada de la promoción antes del concierto de esta noche en la Posada de Babylonia. Entonces, con su música, tratará de explicar lo que intenta hacer con palabras: definir el álbum. «Es la pregunta más difícil. Puedo decir que es un disco muy real porque todo lo que pasa en él es muy real. Es un disco lleno de historias que todo el mundo puede empatizar y que o las he vivido yo o las he visto en gente de muy cerca».

Declarado seguidor de los Beatles, Supertramp y Queen, el cantante de 'Vi', un single que lleva meses sonando en programas de televisión y en la radiofórmula, el malagueño dice preferir el español para expresarse. «Creo que los más valientes son los que escriben en castellano porque es mucho más difícil decir cosas con este idioma. Por eso en la lírica soy fan de Serrat, Silvio Rodríguez, Sabina o Drexler», apunta.

Componer y componer

Su trabajo consiste en contar historias de forma sencilla, directa y, por qué no, bella. «Sería muy arrogante o vanidoso decirlo porque creo que nunca he llegado a que una canción mía pare el corazón de la gente con una letra protesta, pero sí entiendo que un tema debe decir algo, que tenga un lenguaje entendible, se pueden decir cosas bonitas como si fuera una conversación musicada», insiste.

La extensión del cuerpo de Pablo López es su piano y lo que más le fuerza a componer, según él mismo dice, es la necesidad. «También preciso de la soledad absoluta, me da un poco de vergüenza, es como si me quedara en pelotas. Y para escribir también necesito mi piano y estar en mi casa», confiesa este músico desde los cuatro años con vocación de comunicador. Bañado en las masas de la tele, el cantante no reniega de su paso por OT, pero es firme defensor de tomar por el camino largo en vez de por el fácil. «Yo ahora mismo estoy muy satisfecho, pero por medio he tropezado muchísimas veces, he montado movidas que no debería, pero no me arrepiento porque todas esas historias me han llevado al punto en el que estoy ahora». Eso sí, a pesar de los malas experiencias, «jamás he pensado en abandonar. Me he dado cuenta de que no sirvo para otra cosa que para la música. Si no pudiera ejercer esta profesión sería un indigente o tendría que mudarme a otro planeta», comenta el compositor andaluz.

Grabado en Barcelona y masterizado en Londres, 'Once historias y un piano' ha contado con la producción de Kim Fanlo, ex Nena Daconte. Pero este no es el fin de Pablo López. «Mi meta es no tener ninguna meta y seguir avanzando con firmeza. No he dado ningún salto de gigante, no he aparecido de repente, sino que lo he hecho muy poquito a poco y siento que lo hago de forma muy firme. Mi objetivo es seguir en esta línea». Y, ¿hacia donde va?, se le pregunta. «Yo quiero componer muchísimo (le gustaría hacerlo para Beyonce), para mí y otros artistas. Tengo la esperanza y la tranquilidad de que pase lo que pase con mi carrera y mi vida siempre quedarán muchas canciones que escribir y disfrutar. De un tiempo a esta parte lo que más ha cambiado en mi vida y en mi carrera es que yo estoy disfrutando de mis propias canciones y eso nunca me había pasado». Esta noche toca comprobarlo, en la primera prueba, aquí, en Cádiz, de su recién estrenado trabajo.