Hora canaria para todos
El Congreso solicita al Gobierno un informe que evalúe las consecuencias económicas si el país adopta la misma hora que la islas afortunadas
Actualizado:El partido de la Liga de Campeones, esta noche a las 19.45 horas. Los informativos televisivos de las principales cadenas a las 14.00 horas, como ya hacen otras más pequeñas. El Sol se despierta antes por el Este. Y toda España tiene la misma hora que Santa Cruz de Tenerife o Las Palmas de Gran Canaria. Todo esto parece una utopía, pero puede estar más cerca de lo que pensamos. Sobre todo cuando el Congreso de los Diputados ha cogido las manillas del reloj. La Cámara baja ha solicitado al Gobierno que haga un informe que evalúe las consecuencias económicas si todo el territorio español adquiriera la hora marcada por el meridiano de Greenwich.
El motivo no es otro que conciliar la vida laboral y familiar, según la subcomisión parlamentaria que está estudiando este cambio y que en breve tendrá terminado un borrador de propuestas. «Implica una transformación de nuestros usos y costumbres diarios, pero es innegable que los resultados nos harían converger con Europa en productividad, competitividad, conciliación y corresponsabilidad», señala el texto que están estudiando sus señorías y que a los canarios nos les ha hecho tanta gracia. Creen que el recordatorio -una hora menos en Canarias- les da un toque distintivo y una publicidad impagable. Sin embargo, la Asociación para la Racionalización de los Horarios Españoles (Arhoe) considera que este adelanto es fundamental para el desarrollo del país y para que los ciudadanos padezcamos menos problemas de insomnio o estrés.
«Es lo que se denomina un ritmo africano, o lo que es lo mismo, seguir el horario del sol: levantarte con él y acostarte cuando empieza a ser de noche», apuntó Nuria Chincilla, directora del Centro Internacional Trabajo y Familia del IESE. Un cambio que, por ejemplo, también ayudaría a dar una unidad horaria a la Península Ibérica, que se rompió hace siete décadas.
Hasta 1942, España mantuvo la misma hora que Reino Unido o los vecinos portugueses. Pero llegaron los aires belicosos de la Segunda Guerra Mundial y la necesidad por parte del Gobierno franquista de demostrar su lealtad inquebrantable hacia el régimen nazi. Como España estaba hecha unos zorros después de la confrontación fratricida, Franco no cedió a los deseos alemanes de meterse de lleno en el conflicto. Solo accedió a mandar la División Azul hacia la URSS y dar rienda suelta al cariño filonazi. Y, además de hacer público este cariño antes de que los aliados le dieran la vuelta a la guerra, algún dirigente franquista tuvo la brillante idea de cambiar la hora y poner la misma que Berlín. Es decir, la actual, que tantos problemas de conciliación ha traído en España y que se ha visto agravada con otros efectos, como el retraso horario del 'prime time' televisivo. La Arhoe está recogiendo firmas para convencer a las teles de que lo adelante.