Hay Santander para Rato
Actualizado: GuardarEn este país no se soporta el éxito, aunque sea un éxito venido a menos, menguante. En el vía crucis del auge y caída de Rodrigo Rato hay grandes luces: ministro que marcó el comienzo del boom del ladrillo, humillado aspirante a presidente del gobierno que el cuaderno azul no eligió, abandonado del FMI por la puerta de atrás, presidente de una caja de provincias, artífice del fiasco de Bankia (algunos le llaman estafa) que nos ha costado a todos unos 22 mil millones de euros que jamás volveremos a ver y, como colofón, nombrado asesor internacional del Banco de Santander. Los recelos de algunos por este nombramiento son infundados; por muy gafe que crean que sea ¿qué mal puede hacer este hombre asistiendo un par de veces al año a una reunión y llevándose unos cuantos cientos de miles de euros para cubrir gastos? Botín sabe lo que hace y a las pruebas me remito: sabe cuando comprar un florero. Hasta le debe haber comprado una campanita y todo.