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Sociedad

Rouco asegura que el celibato «no se debe revisar»

El presidente del episcopado contradice al número dos del Papa Francisco, que planteó que esta condición se podía «discutir»

A. P.
MADRID.Actualizado:

El presidente de la Conferencia Episcopal, Antonio Rouco Varela, considera que el celibato «no se debe revisar», con lo que entra en abierta contradicción con el nuevo secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, quien aseguró que la cuestión se podía «discutir» porque se trata de una «tradición eclesiástica». Aunque admitió que, efectivamente, la imposibilidad de que los sacerdotes contraigan matrimonio «no es un dogma», como subrayó Parolin, Rouco adujo que el celibato ha sido refrendado por el «magisterio de los papas y los sínodos».

Para el presidente del episcopado, sus palabras no difieren de las expresadas por el próximo representante de la Curia, que tomará posesión de su cargo a mediados de octubre, en sustitución de Tarcisio Bertone. Parolin, en su primera entrevista tras conocerse su nombramiento, se mostró partidario de «reflexionar y profundizar sobre estos temas, que no son de fe definida, y pensar en algunas modificaciones». Con todo, el número dos del Vaticano supeditó cualquier cambio al mantenimiento de la unidad dentro de la Iglesia.

Rouco, cuyo estilo en nada se parece al del Papa Francisco, sostuvo que el carácter célibe del clero es una cuestión que «ha sido reafirmada una y otra vez a lo largo de toda la historia» de la Iglesia. Pese que el dirigente eclesial destacó que el celibato solo era una norma, entroncó esta tradición con «verdades profundas de la fe». El cardenal y arzobispo de Madrid, que inauguró el nuevo curso académico de la Universidad Pontificia de Salamanca, tendrá oportunidad de ver al Papa el año que viene, dado que del 24 de febrero al 8 de marzo los obispos españoles viajarán a Roma para cumplir con la llamada visita 'ad limina', que los episcopados de todo el mundo realizan periódicamente al pontífice.

Esta circunstancia obligará a cambiar la fecha de la próxima asamblea plenaria, que se iba a celebrar entre el 24 y el 28 de febrero, y en la que se elegirá al nuevo presidente de la Conferencia Episcopal.