La CNC propone prohibir los servicios complementarios en los contratos de luz
Recuerda que son el origen de «muchas quejas» y además «desincentivan» el cambio de suministrador de electricidad
MADRID. Actualizado: GuardarLa Comisión Nacional de la Competencia (CNC) aboga por obligar, o directamente prohibir, los contratos de suministros de electricidad que estén ligados a servicios complementarios, como son el mantenimiento o las inspecciones de los equipos. El organismo supervisor considera que son origen de «muchas quejas» por parte de los consumidores, en la medida en que el alta en dichos servicios «en muchas ocasiones no se produce de forma voluntaria, sino ligado a determinados descuentos en el consumo».
Por lo general, explica la CNC, este tipo de contratos tiene una vigencia anual «que obliga al consumidor a seguir haciendo frente a su pago durante dicho periodo, incluso después de cambiar de comercializador». «Con el fin de evitar que condiciones contractuales de esta naturaleza desincentiven el cambio de suministrados, se considera adecuado introducir obligaciones o prohibiciones en la normativa de desarrollo a este respecto», concluye el análisis.
Es una de las muchas reflexiones de la CNC contenidas en el informe que analiza el anteproyecto de ley del sector eléctrico, aprobado por el Gobierno el pasado 12 de julio. El organismo advierte de que la valoración de la reforma se ve «seriamente limitada y condicionada» por el hecho de que Industria no ha remitido a Competencia los diferentes reales decretos y órdenes ministeriales que conforman el grueso de la normativa.
Competencia asegura que «comprende y comparte» la necesidad de que la reforma «garantice la sostenibilidad económica y financiera del sistema», objetivo que domina el espíritu de la norma. Pero al mismo tiempo cree que no se hace «suficiente hincapié» en el papel «fundamental e irremplazable» que debería tener la existencia de «una competencia efectiva en el sector». El anteproyecto de ley no hace referencia, según el informe, a los niveles de competencia alcanzados en el mercado mayorista, que la CNC considera «insuficientes y claramente mejorables».
Separación de actividades
En su análisis, Competencia alerta de la necesidad de una separación efectiva entre actividades de generación, distribución y comercialización de la electricidad «para incentivar la competencia entre operadores en el sector». El organismo constata que, en lo que respecta a la integración vertical de los principales distribuidores, esta delimitación de actividades «no es todo lo efectiva que debiera». Alerta de que sobre el consumidor «se sigue creando confusión» entre ambas actividades por las propias compañías integradas, «que utilizan una misma imagen corporativa que aprovechan para fidelizar al cliente y mejorar su posición en mercados conexos».
Al igual que hiciera la pasada semana la CNE, Competencia proporciona un varapalo a la regulación sobre autoconsumo, que tiene en el llamado peaje de respaldo su figura más cuestionada. Se trata de una especie de tasa que el autoconsumidor tendrá que pagar por la electricidad que produzca, aun cuando sea para consumo propio.
Aunque el importe del peaje deberá ser concretado en un posterior reglamento, la CNC considera «fundamental que el régimen finalmente arbitrado no resulte discriminatorio ni innecesaria o desproporcionadamente restrictivo» para la producción de electricidad en régimen de autoconsumo.
La CNC considera que los cambios propuestos en el proyecto de ley sobre la Tarifa de Último Recurso (TUR) -que pasa a denominarse Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC)- «son más formales que de fondo». Desde el punto de vista de la competencia, «no se observan avances de signo liberalizador que impliquen la eliminación de las tarifas reguladas, su aplicación a colectivos más reducidos, o incentivos que faciliten el progresivo acceso al mercado libre».