Los colectivos reclaman mayor sitio dentro de la efemérides

En un principio se diseñó el 24 de septiembre como una fiesta en la que el gran peso recaía en entidades y asociaciones de la ciudad. Sin embargo, pasado el tiempo no se ha conseguido esa implicación ciudadana que se pretendía, y solo la Feria de la Tapa, organizada por los comerciantes, ha logrado asentarse como gran éxito de público. Las recreaciones comenzaron con buen pie, pero los múltiples cambios de ubicación y horas han mermado su asistencia. Y para uno de los colectivos más activos en este sentido, el del Centro de Día, considera necesario que se le dé su sitio a la participación ciudadana. «Recurrir a grupos de fuera está muy bien, pero mejor sería invertir en lo nuestro como patrimonio cultural rentabilizándose con los años, y conseguir ser protagonista activo de los actos, fundamental para crear conciencia de pueblo. Si de verdad nuestros representantes municipales apuestan por conseguir que el 24 de septiembre sea la fiesta por excelencia de nuestra ciudad, hay que trabajar por esa participación real que haga posible conseguir esa concienciación», expuso su presidente, Miguel Camas.