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Interior de la Bolsa de Madrid. / Chema Moya (Efe)
MERCADOS | MADRID

La decepción olímpica pesa en el Ibex

El selectivo español pierde un 0,26% y se sitúa en los 8.632 enteros, con la prima de riesgo en 259,30 puntos básicos

CRISTINA VALLEJO
MADRIDActualizado:

El cierre en los mercados fue mixto. El peor de todos fue el PSI-20 de Lisboa, que retrocedió un 0,40%, mientras que el Ibex-35 cayó un 0,26%, para dar un último cambio en los 8.632,50 puntos, y el Cac 40 francés, un 0,22%. En verde, el mejor fue el Ftse Mib de Milán, que subió un 1,16%, mientras que el Dax alemán terminó la jornada prácticamente en tablas. Para el selectivo español, el resultado pudo haber sido mucho peor, dado que marcó mínimos por debajo de los 8.575 puntos.

Y dado que el índice Nikkei de Tokio había cerrado por la mañana con una fuerte subida del 2,48% en la primera sesión de Bolsa tras la elección de la capital nipona como sede de los Juegos Olímpicos de 2020, la fuerte caída con la que comenzaba el selectivo español había que ligarla con la eliminación de Madrid. La decepción que sufrieron quienes apostaban por la celebración de los juegos en la capital española también se observó claramente en la Bolsa, aunque duró bastante poco. Tras marcar mínimos de la sesión, el selectivo volvió a recuperar los 8.600, volvió a recaer en el ecuador de la sesión, oscilando alrededor de ese nivel, para reconquistarlo claramente a partir de la apertura de la Bolsa de Nueva York.

En el selectivo español, Bankinter lideró las ganancias con una revalorización del 1,64%. A continuación, Jazztel, Mediaset, IAG, Acerinox y el Popular, que ganaron más de un punto porcentual. Pocos valores más terminaron la sesión en verde. Algunos de los valores que terminaron en positivo fueron entidades financieras, como CaixaBank y el Sabadell. Otros, cíclicos, como ArcelorMittal y Técnicas Reunidas. Y también algún valor conservador, como Dia y Amadeus.

En negativo, FCC fue el peor, con un descenso del 2,35%, que podríamos explicar por la decepción olímpica. A continuación, Ebro, que retrocedió un 1,81%. Grifols, Red Eléctrica y Enagás se dejaron más de un punto porcentual. Todos los “blue chips” terminaron la jornada con descensos. El peor entre ellos fue Repsol, que retrocedió un 0,93%. El resto no cayó demasiado. Así, Santander y Telefónica perdieron poco menos de un 0,40%, mientras que BBVA retrocedió un 0,27% e Iberdrola, un 0,02%. Inditex, por su parte, terminó la jornada en tablas.

En el Mercado Continuo, Bodegas Riojanas fue el valor que más subió, con una revalorización cercana al 13%. A continuación, Nicolás Correa, que ganó un 12,70%. Después, aunque lejos, Reno de Medici y Natra, que avanzaron más de un 3%. En negativo, Quabit y Uralita fueron los peores, con caídas de alrededor de un 5%.

Asia tira del resto

En la agenda de la sesión, contamos con la publicación de varios datos japoneses, como el PIB, que creció, según su dato revisado, a un ritmo anualizado del 3,8% en el segundo trimestre, desde el 2,6% anunciado a mediados de agosto. Quizás, pues, la fuerte subida del índice Nikkei de Tokio tenía más que ver con esos datos reales que con la expectativa de lo que ocurrirá gracias a la celebración de los Juegos Olímpicos. Puede ser un impulso, sin duda, pero más lo es la política expansiva que está desarrollando la autoridad monetaria del país. También en Asia, cifras de precios en China: se colocó en el 2,6% en agosto, de acuerdo con lo previsto y una décima por debajo del cierre del mes anterior. También, cifras comerciales.

Así, las exportaciones crecieron un 7,2% en agosto, por encima del 6% que esperaban los analistas. Y las importaciones, un 7%, por debajo del 11,3% que esperaban los analistas. De ahí que la balanza comercial del país tuviera más superávit del que esperaban los expertos. Además, marcó máximos desde el año 2008. Gracias a esas referencias y, quizás, también por el triunfo de sus vecinos japoneses, que celebrarán la próxima convocatoria olímpica, la Bolsa china registró su mejor sesión de los últimos nueve meses. En la zona euro, la referencia más relevante fue la del índice de confianza del inversor, el Sentix, que mejoró desde los -4,9 hasta los 6,5 puntos en septiembre, cuando los analistas esperaban que mejorara, pero sólo hasta los -2,8 puntos.

En el mercado de deuda, subió la rentabilidad de los bonos alemanes a diez años, que se acercó de nuevo al 2%, pero la de Estados Unidos se mantuvo en el 2,91%. Los inversores no están muy seguros de qué hacer con la deuda más conservadora, puesto que el último dato de empleo de Estados Unidos puede ponerle a la Reserva Federal más difícil su decisión sobre el “tapering”, sobre la retirada paulatina de los estímulos. La rentabilidad de los bonos españoles a diez años se mantuvo en el entorno del 4,53%. Y la de los italianos, en el 4,52%. Con ello, la prima de riesgo de España se mantuvo en el entorno de los 257 puntos básicos. La de Italia, en los 255. Tranquilidad, pues, en Italia, pese a que en el Senado se celebraba una reunión para decidir si expulsar, o no, a Silvio Berlusconi lo que, recordamos, puede poner fin al Gobierno, puesto que el partido de Il Cavaliere podría retirar su apoyo al Ejecutivo de Enrico Letta.

En el mercado de divisas, el euro subió ligeramente con respecto al dólar, hasta situarse en 1,3264 unidades.

Siria se enfría y el crudo baja

En el de materias primas, significativa caída del precio del crudo. El barril de Brent, de referencia en Europa, cayó un 1,83%, hasta los 114 dólares. El de West Texas, de referencia en Estados Unidos, cayó un 0,88%, para caer por debajo de los 110 dólares, quizás el crudo se replegaba en Estados Unidos como consecuencia de los máximos de dos años que marcaba el viernes. Quizás convenía recoger beneficios. Pero, también, posiblemente, la caída del precio del crudo se debió a que los tambores de guerra se aminoran.

El secretario de Estado, John Kerry, ha ofrecido al régimen de Al Assad la posibilidad de que el país entregue su arsenal químico. Rusia se ha mostrado de acuerdo y también ha invitado a Siria a que deje sus armas químicas en manos de los organismos internacionales. Y Siria parece dispuesta a hacerlo. De ser así, Estados Unidos no bombardearía al país, con lo que nos quitaríamos de en medio, además de un bombardeo cuyas consecuencias sobre la población civil no están del todo claras aunque sus objetivos sean, en principio, exclusivamente militares, una gran incertidumbre sobre los mercados que se suma a la del resultado de las elecciones alemanas, el día 22 de septiembre, y, la próxima semana, la reunión ordinaria de política monetaria de la Reserva Federal.

Los que subieron fueron el cobre y el oro, con ganancias de un 0,55% y de un 0,20%, respectivamente. De todas maneras, el precio del oro no recuperó los 1.400 dólares.