Economia

Las grandes empresas mejoran sus ventas pero siguen destruyendo empleo

Las perspectivas de cara al segundo semestre son desiguales, aunque hay optimismo en sectores como la gran distribución y las telecomunicaciones

MADRID. Actualizado: Guardar
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Las cifras de negocios de las mayores compañías españolas empiezan a lanzar señales de que lo peor de la recesión puede haber quedado atrás. La última estadística de ventas, empleo y salarios en las grandes empresas publicada por la Agencia Tributaria refleja una moderación lenta, pero general, en las caídas de las ventas de las grandes corporaciones no financieras desde la máxima debacle observada en el último trimestre de 2012, cuando la economía española se hundió en su segunda gran contracción de esta crisis. Sin embargo, la mejora evidente en las cifras de negocios no impide que estas corporaciones sigan destruyendo empleo. En junio las plantillas sufrieron una reducción media del 2,5% interanual.

Los datos de junio de ventas de las grandes empresas no financieras, deflactados y corregidos a efectos de calendario, muestran una caída anual del 3,7%. Ese descenso, aunque es 0,5 puntos mayor que el de mayo, supone una moderación respecto de los meses y trimestres precedentes (en abril el retroceso fue del 4,3% y en marzo del 4,8%). Se trata, especialmente, de una caída mucho menos acusada que las registradas en enero de 2013 y diciembre de 2012 (ambas del 7%), cuando la recesión estaba en pleno apogeo.

La moderación se observa con mayor claridad al analizar los datos trimestrales. Entre abril y junio la cifra de ventas se redujo un 3,7%, frente al 5,1% de enero-marzo y al 7% del último trimestre de 2012. La agencia tributaria deduce de esos datos que la reducción del negocio empieza a «atenuarse a un ritmo lento pero sostenido». Esa tendencia, unida al frenazo en el crecimiento del paro registrado, a la caída mínima (0,1%) del PIB en el segundo trimestre, a los buenos resultados de la balanza comercial y a la relativa calma en los mercados apuntaría a un cambio de ciclo macroeconómico que, eso sí, aún tardará en ser percibido por los hogares.

La Agencia Tributaria elabora esta estadística a partir de información fiscal proveniente de las compañías con volumen de negocio superior a 6,01 millones de euros el año anterior. El número de empresas que cumplen ese requisito ha disminuido sin parar desde 2008. Entonces, España contaba con 36.763 grandes empresas a efectos de Hacienda. A comienzos de 2013 quedaban 28.022, tras 'caerse' de la lista el 1,9% en 2012.

La caída del número de grandes empresas y de sus cifras de ventas está motivada por la hundimiento del consumo que arrastra la economía en el último lustro. Los buenos resultados de las exportaciones permiten a muchas compañías seguir a flote, pero no bastan para compensar la atonía de la demanda interna.

Cierre del año

Está por ver qué ocurrirá en el segundo semestre, período que el Gobierno dice que será el de la vuelta del PIB a tasas positivas. Las perspectivas de las grandes empresas son desiguales. Hay sectores como el turismo en los que se palpa escepticismo ante la recuperación. El presidente del grupo Globalia y Air Europa, Juan José Hidalgo, señala que «me gustaría que fuera así, pero no puedo decir algo que no veo. Aún hay mucho paro y la situación es difícil. Mientras no vea que baja el paro, mejora el consumo y la gente vuelve a ir a los restaurantes, no podré ser optimista». «Aún nos queda tiempo de batir el cobre», zanja.

El optimismo es mucho mayor en el sector de las telecomunicaciones. Telefónica España cree que «los indicadores macro van a dar un respiro en los próximos meses». «Somos optimistas de cara al final de este año y 2014 porque detectamos, a través de los resultados comerciales y operativos, que el mercado claramente se está reactivando», aseguraron fuentes de la compañía.

La gran distribución afronta un cierre de año menos complicado que en 2012, cuando el consumo recayó por la subida del IVA y del IRPF y la supresión de la paga de Navidad de los empleados públicos. Fuentes de El Corte Inglés señalaron, en su última explicación de resultados, que el grupo aprecia desde el verano signos positivos de cara a la segundo semestre, sobre todo ante la campaña de Navidad. De ahí que, con cautela, se declare optmista. La patronal de las grandes distribuidoras (Anged) coincide en que el cierre de 2012 fue «especialmente malo» pero ahora «hay un conjunto de factores e indicadores positivos que indican que las expectativas del consumo para la segunda mitad del año han mejorado».