La delegada en Madrid sigue «grave» tras ser operada

La delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, permanece «con pronóstico grave» en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital de La Paz, según el último parte divulgado por el centro médico. Cifuentes ingresó en la tarde del martes tras impactar la moto con la que circulaba por el centro de Madrid contra un turismo. La dirigente popular sufrió una fuerte contusión pulmonar por la fractura de varias costillas.

El traumatismo derivó en un hemoneumotórax, acumulación de aire y sangre en los pulmones, lo que obligó a intervenir de urgencia para reparar una arteria que se encontraba dañada. Aunque no se teme por su vida, Cifuentes está «sedada» y «con ventilación mecánica». El centro hospitalario, que no emitirá nuevos partes hasta que el estado de Cifuentes experimente variaciones, informó que la paciente se encuentra «en estado de semiinconsciencia» y requiere de fármacos para controlar la presión sanguínea.

El presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, reveló que su compañera de partido «había respondido bien» a «una prueba neurológica» a la que fue sometida ayer por la mañana.

La delegada sufrió la lesión al caer con su escúter contra la protección del carril bus por el que circulaba -el tránsito de motos por esta vía está permitido- en una maniobra para evitar la colisión con un vehículo que se cruzaba en su trayecto. Tanto Cifuentes como el conductor del turismo dieron negativo en la prueba de alcoholemia.

Representantes de distintos ámbitos de la política se acercaron ayer al hospital para interesarse por la salud de la delegada del Gobierno, una figura emergente dentro del Partido Popular.