Una trágica explosión en un submarino indio provoca la muerte de sus 18 tripulantes
SHANGHÁI. Actualizado: GuardarEl ministro de Defensa indio, que el lunes sacó pecho durante la ceremonia de presentación del primer portaaviones 'Made in India', tuvo ayer que anunciar la pérdida de vidas humanas, en el incendio y posterior deflagración de uno de sus submarinos propulsados por una combinación de baterías eléctricas y diesel, el INS Sindhurakshak. Durante la madrugada de ayer, y mientras estaba fondeado en el puerto de Mumbai, una explosión reventó el casco de este buque de 2.300 toneladas, en cuyo interior trabajaban 18 tripulantes que no pudieron escapar por las llamas que engulleron el submarino. La deflagración fue de tal magnitud -incluso dañó otros barcos en las inmediaciones- que los medios de comunicación locales no esperan que haya supervivientes entre las víctimas.
Aunque no hay información oficial sobre las causas de la tragedia, todo apunta a que se produjo mientras los tripulantes estaban llevando a cabo operaciones de mantenimiento en las baterías del submarino. «El gas de hidrógeno que se genera al cargar las baterías podría haber provocado el incendio, que luego se habría extendido al compartimiento de los misiles, donde se podría haber registrado la explosión», elucubró el vicealmirante retirado A. K. Singh.
La tragedia deja en evidencia que la botadura del portaaviones es un espejismo, y que las carencias militares de India son muchas. El país, que busca ponerse a la altura tecnológica de China, demostró también que la vetusta infraestructura del país no está preparada para lidiar con emergencias.