Fallece el valenciano que cayó a la playa desde la barandilla de La Concha
El joven estaba sentado y se precipitó hacía atrás golpeándose la cabeza con las rocas
SAN SEBASTIÁN / VALENCIAActualizado:El joven valenciano, de 26 años de edad, que se cayó este martes a la playa desde la Barandilla de La Concha de San Sebastián, ha fallecido como consecuencia de las graves heridas sufridas, según han confirmado fuentes cercanas al centro hospitalario en el que estaba ingresado. El suceso tuvo lugar sobre las 4.30 horas de la madrugada, cuando el joven estaba sentado sobre la barandilla y se precipitó hacía atrás golpeándose la cabeza con las rocas que están junto al muro, ya que en ese momento la marea se encontraba baja.
El joven se encontraba con su pareja en el momento del accidente y fue trasladado en estado muy grave a un hospital, donde permanecía en la Unidad de Cuidados Intensivos. Al parecer, la pareja se hallaba de vacaciones en San Sebastián, disfrutaba de la Semana Grande y había pasado la noche de fiesta.
Según fuentes consultadas, en un momento determinado, el chico se sentó sobre la barandilla de la playa, de espaldas al mar, en una zona que aproximadamente dista unos veinte metros de la farola de la primera rampa de bajada a la playa. Por causas que todavía están siendo investigadas por los agentes, el joven valenciano perdió el equilibrio y se precipitó hacia atrás desde una altura de unos cinco metros.
La víctima cayó a la playa que, en aquel instante, se encontraba con la mera baja. El cuerpo del joven impactó parte contra la arena compacta y dura así como contra unas piedras adoquinadas de contención del muro del propio paseo que afloran en bajamar. Como consecuencia del impacto, el joven quedó inconsciente. Su novia, testigo de todo lo sucedido, alertó a otras personas que se encontraban en las proximidades de la zona del accidente.
Los integrantes de una patrulla de la Guardia Municipal donostiarra fueron los primeros en atenderle. Los agentes no tardaron en percatarse de la gravedad de las lesiones que presentaba y fueron asimismo testigos de cómo la víctima sufría una parada cardiorrespiratoria, según explicaron. Sanitarios de una ambulancia medicalizada de Osakidetza se trasladaron con la máxima urgencia al lugar, donde gracias a las maniobras a que le sometieron lograron reanimar al paciente para más tarde evacuarle al Hospital Donostia.