Argentina vota dividida en unas elecciones clave para el futuro de Cristina
La presidenta se juega en las primarias de hoy sus credenciales para una reforma constitucional que permita su reelección
BUENOS AIRES.Actualizado:Más de 30 millones de argentinos -incluidos los que tienen entre 16 y 18 años, que votarán por primera vez- se movilizarán hoy en una jornada de elecciones primarias obligatorias para elegir a los candidatos de las legislativas, que se celebrarán el próximo mes de octubre. Los sondeos anticipan que el Gobierno de Cristina Fernández tendrá el mayor caudal de apoyos a nivel nacional, es decir, sumando todos los distritos. No obstante, la madre de todas las batallas se dirime en la provincia de Buenos Aires, donde vota el 40% del electorado y donde el oficialismo tiene la pelea más difícil.
En esa provincia las encuestas colocan a Sergio Massa, de la oposición, a la cabeza de las preferencias como candidato a diputado. El ahora exalcalde de Tigre, una ciudad al norte de Buenos Aires, fue jefe de Gabinete de Cristina, pero se ha cambiado de bando, si bien tampoco es un opositor empedernido. Reivindica lo bueno del Ejecutivo de Fernández y promete atender retos como la inseguridad, la inflación y otras demandas de la clase media. Algunos observadores sostienen que la estrategia de Massa evoca a la de Henrique Capriles en Venezuela, el opositor que empezó a aglutinar a los desencantados con Hugo Chávez a partir de reconocer los logros de la revolución bolivariana. Si gana, Massa podría aspirar a ser gobernador en 2015, o incluso presidente.
Su rival es el alcalde de Lomas de Zamora, otra ciudad cercana a Buenos Aires que se presenta como el delfín de Cristina en la provincia. Martin Insaurralde, desconocido hasta hace un mes, está próximo a empatar a su contrincante. Según la empresa de sondeos Poliarquía, Massa tiene un 32% de apoyos e Insaurralde el 30%. Tercero llega Francisco de Narváez, el diputado que en 2009 le ganó al expresidente Néstor Kirchner (2003-07) en las legislativas de esa misma provincia. Con un discurso fuertemente opositor ahora obtiene el 13% de intenciones de voto.
Las tres corrientes
Los críticos aducen que el porcentaje de apoyos a Insaurralde está lejos del 54% que obtuvo la presidenta para su reelección hace apenas dos años. El analista Rosendo Fraga explica que en Argentina hay un tercio de electores que siempre se inclina por el oficialismo, un tercio que vota en contra y un tercio que fluctúa. Este último grupo puede apoyar en los comicios de hoy a un candidato opositor y mañana, en otra instancia electoral, al oficialismo. De ahí los cambios bruscos que se registran en los resultados electorales argentinos. Si bien se descuenta el triunfo del oficialismo a nivel nacional -por encima apenas del 30%-, ese respaldo no alcanzaría para que la presidenta se embarque en un proyecto de reforma constitucional para una nueva reelección.
Tampoco lo busca, dice ella. Por eso, en estas elecciones los dirigentes con aspiraciones para sucederla en 2015 ya han hecho sus apuestas. El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, sabe que no goza de la confianza de la mandataria pero, en este combate en las urnas, se ubica firme junto a ella y a Insaurralde. Las analistas interpretan que el apoyo de Scioli al candidato oficialista -mayor incluso que el de la propia Cristina- explica su rápido ascenso.
Del otro lado, Mauricio Macri, el alcalde derechista de la ciudad de Buenos Aires, que apuesta por Massa, a quien dijo que votaría si viviera en ese distrito. En la capital argentina, los candidatos de Macri al Senado y a la Cámara baja obtendrían el primer puesto en estas elecciones primarias, pero el jefe de Gobierno de la ciudad no tiene una estructura fuerte en las provincias como para proyectarse hoy a la presidencia.