La tensión en el Sinaí desata la alarma en el sur de Israel

La ciudad israelí de Eilat, situada en el extremo sur del país, sufrió ayer de nuevo los efectos de su delicada situación geográfica, entre Egipto y Jordania. Su aeropuerto permaneció cerrado durante dos horas por orden del Ejército, debido a una alerta de seguridad cuyo origen no se llegó a precisar. Eilat es un popular destino turístico en el Mar Rojo, tanto para israelíes como para extranjeros, y se encuentra este mes en temporada alta, por lo que las autoridades desviaron algunos de los vuelos que se esperaban a lo largo del día al pequeño aeródromo de Ovda, desde el que los turistas fueron transportados por carretera.

No es la primera vez que la ciudad balneario se encuentra en situación de alerta, ya ha sido atacada en el pasado con cohetes lanzados desde el Sinaí egipcio o desde territorio jordano. Egipto desplegó en julio fuerzas adicionales en la península del Sinaí para luchar contra los grupos radicales armados que han multiplicado los ataques, esencialmente contra las fuerzas del orden, desde la destitución del presidente Mursi. En previsión de que eventuales disparos afectasen a Eilat, el ejército israelí instaló a su vez una batería antimisiles en la ciudad.

Este mismo miércoles, las fuerzas armadas egipcias aseguraron que al menos 60 milicianos han muerto por la intensificación de su campaña en la península el mes pasado. Asimismo, cifró en 64 el número de milicianos heridos y en al menos cien los arrestados. Egipto también ha aumentado sus esfuerzos desde la caída de Mursi para cerrar los túneles de contrabando desde el Sinaí a la Franja de Gaza, una importante ruta para las organizaciones palestinas que consiguen armas mediante estas instalaciones subterráneas.

Según el portal de noticias Ynet, la clausura temporal del aeropuerto de Eilat decretada ayer no parece estar vinculada a los temores de un ataque inminente de Al-Qaida, que llevaron a Estados Unidos y a otros países a cerrar sus misiones diplomáticas en países de Medio Oriente y a evacuar a sus ciudadanos en Yemen.