La derecha de Sarkozy se rasca el bolsillo para salvar a la UMP
Actualizado:Cuando el pasado día 8 Nicolas Sarkozy regresó a la vida política francesa, las deudas amenazaban con devorar su partido. La búsqueda de donantes era una emergencia y el tiempo corría en contra de la UMP que, en apenas tres semanas, tenía que reembolsar los 11 millones de euros de un préstamo que sirvió para financiar su última campaña para la presidencia. El exmandatario irrumpía con un claro objetivo: concienciar a los contribuyentes. Los mismos a los que ayer elogió por reunir 8,3 millones en tiempo récord. La suma supone una inyección de tranquilidad por ser más que suficiente para obtener una moratoria de dos meses.
«Vuestro gesto de solidaridad me ha emocionado mucho. Os estoy infinitamente agradecido», escribió en un correo electrónico a los donantes el antiguo jefe de Estado, al que el Consejo Constitucional invalidó a principios de julio las cuentas de su campaña. La decisión -adoptada tras descubrir que la formación conservadora había superado en 466.118 euros el techo de gasto de 22.509.000 euros en la segunda vuelta electoral de 2012- privó a la UMP de una subvención pública cercana a los 11 millones por la cual contrajeron la actual deuda.
El mensaje de Sarkozy, que será enviado a los contribuyentes de la UMP durante el resto de la semana por correo ordinario, no ha sido bien recibido por algunos miembros de su partido. En opinión del diputado Bernard Debré, el exmandatario no ha sido especialmente generoso pese a aportar 7.500 euros, el máximo permitido por la ley. «Me atrevo a decir que podría haber dado tal vez un poco más», señaló en la cadena iTéle.