¡Este año sí?

Aventurar la suerte que uno va a correr, su destino próximo, resulta tan atractivo como inútil. Es materia de discusión, de debate continuo, pero te apoyas sobre pilares demasiado débiles, inestables, porque si la vida es imprevisible el fútbol mucho más.

El Cádiz completa un excelente trabajo este verano en el montaje de su plantilla. Es menester aplaudir o criticar antes de conocer el resultado. El paso del tiempo es terreno de ventajistas. Gaucci y Agné han armado un plantel equilibrado para la idea de fútbol del aragonés (sin un delantero de referencia), compensado en todas las líneas si se firman un central titular y un buen arquero sub 23, y con los mimbres necesarios, este año sí, para al menos pelear por el ascenso.

Se agrupan numerosos y variados argumentos para pensar, que no soñar, que este equipo es favorito para ser campeón del Grupo IV. Cuando se habla de ‘nombres’, uno se centra en ese currículum que arrastra el futbolista, y de los once fichajes de este curso más de la mitad jugaba el año pasado en división de plata. ‘Las categorías están para algo’, que se dice, y Nafti, Martins o Kike López son jugadores con mejor cartel que Indiano, Fall o Adri Gallardo. Con muchísimas más posibilidades de hacerlo mejor que ellos.

Aparte de ello, se ha ganado en experiencia, crucial en esta categoría por mucho que diga David Vidal. Empezando por el entrenador, que ya sabe lo que es ascender a Segunda. Se ha empezado a trabajar antes y mejor, con casi todos los efectivos. Y la delicada situación económica está reventando a varios rivales como Albacete, Cartagena o Xerez, mientras que el Cádiz se convierte en la principal potencia de la zona sur. Tan atractivo, tan interesante, tan... inútil, como dije al principio. Pero ahora es el momento para hablar de supuestos. En menos de un mes llegarán las realidades.