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Michel Barnier, comisario europeo de Mercado Interior. :: AFP
Economia

La Unión Europea limitará las comisiones por pago con tarjeta

La medida entrará en vigor a mediados de 2015 y supondrá un ahorro de 730 millones de euros anuales para los consumidores

A. JALÓN
MADRID.Actualizado:

La comisión por realizar un pago con tarjeta no podrá superar el 0,3% del importe de la compra. La Unión Europea ha propuesto un nuevo reglamento para limitar las tasas de intercambio en las operaciones con tarjeta: recargos que imponen los gestores de pago y algunos comerciantes para financiar el sistema. Son los minoristas quienes asumen los sobrecostes, con el consiguiente aumento del precio final para el consumidor. Según los servicios de Comisión Europea, la medida podría suponer un ahorro de hasta 730 millones de euros al año para los consumidores.

La comisión máxima que permitirá la UE será del 0,3% del valor de la compra en el caso de utilizar tarjeta de crédito y del 0,2% por el pago con tarjeta de débito. El comisario de Mercado Interior de la UE, Michel Barnier, asegura que el coste del sistema de pagos «representa más del 1% del PIB europeo, equivalente a 130.000 millones al año, costes que nuestra economía no puede permitirse», y calcula que, además del beneficio para los consumidores, los comerciantes podrían ahorrarse hasta 6.000 millones de euros con la nueva normativa. De esta forma, espera poner fin al «nivel injustificadamente alto de tasas de intercambio».

El caso de los billetes de avión es uno de los más representativos por el aumento desproporcionado de las comisiones, ya que, en algunas compañías low cost, el comprador puede llegar a pagar más dinero en concepto de gestión que por el billete en sí. No obstante, no todas las tarjetas estarán sujetas a la nueva normativa. Mientras que los dos gigantes del pago con tarjeta, Visa y Mastercard, deberán atenerse a las nuevas condiciones, otros sistemas como American Express no estarán obligados a ello. En estos casos, los comerciantes tendrán la posibilidad de rechazar la tarjeta o de cobrar un recargo directamente al usuario, para que no repercuta, de esta forma, en todos los consumidores.

No solo los usuarios de tarjetas se verán beneficiados por la medida: el comisario europeo de Competencia, Joaquín Almunia, explicó que «los comercios pasan los costes de la comisión a los consumidores a través de un aumento de precio, por lo que afecta a todos, no solo a aquellos que pagan con tarjeta». También defiende un sistema «transparente», ya que ahora «los consumidores pagan por los servicios de manera oculta».

Desde la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (ANGED) y la Confederación Española de Comercio (CEC), interpretan la medida como «un primer paso muy importante que ahorrará costes a comerciantes y consumidores», aunque la consideran «insuficiente» y defienden una abolición total de los recargos al pago con tarjeta.

Bruselas explica que se abrirá un «periodo de transición» de 22 meses, en el que se limitarán las tasas en las transacciones entre diferentes países, lo que supone que el consumidor podrá utilizar la tarjeta fuera de sus fronteras sin perjuicio económico alguno. Tras ese plazo, los límites máximos - del 0,2% y 0,3%- se aplicarán también en las operaciones nacionales. Una vez se establezcan los límites, los costes de los minoristas se reducirán y los recargos ya no estarán justificados.

Seguridad

El nuevo reglamento introduce medidas para aumentar la protección del consumidor en casos de fraude o incidentes en el pago. Por ejemplo, el usuario asumirá una pérdida máxima de 50 euros si otra persona no titular utiliza la tarjeta, situación relativamente común en casos de robo o extravío. La regulación aumenta en los servicios de pago electrónico por internet, que estarán obligados a cumplir los mismos requisitos y supervisión que las demás entidades de pago.

Joaquín Almunia aseguró que se establecerán unas «condiciones equitativas para los proveedores de servicios de pago», lo que promoverá la incorporación de nuevos operadores al mercado y el desarrollo de sistemas de pago por telefonía móvil e internet en Europa.