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Año nuevo

Ignacio de la Varga
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El Cádiz navega con rumbo. Al fin, parece que se ve la luz tras un mes de dimes y diretes en el que el silencio institucional del club no ha hecho ningún bien a la entidad. Las especulaciones volaron. Algunas de ellas lo hicieron con el fundamento propio de la incertidumbre natural que surge ante el desconocimiento por la opacidad del club. También se desataron los rumores más esperpénticos, pero esos no son nuevos. Todavía resuenan los ecos de aquellas voces que aseveraban sin ningún género de dudas que Sinergy se iba en diciembre, enero, febrero… Ahora vendrá el culebrón del pago a Muñoz, más madera, sobre todo para el que no le guste hablar de fútbol.

Por suerte el Cádiz camina, y a juzgar por la confección de la plantilla lo hace con paso firme. Están llegando buenos jugadores y con experiencia. Atrás queda aquello de no querer un cementerio de elefantes. Gaucci ha comprendido, o Agné se lo ha explicado, que la veteranía en esta categoría es básica y por eso el centro del campo se nutrirá de jugadores con muchos partidos a sus espaldas. A falta de retoques la plantilla tiene buena pinta. Ahora le toca a Agné confeccionar un equipo. El año pasado fue el de las excusas para directivos y entrenador, ya no hay margen. Fallaron todos. Gaucci y Manzano confeccionaron una plantilla de broma pero luego Agné, con el equipo reforzado, no fue capaz de sacarle jugo. Pero eso ya pasó y todos hemos hecho la crítica necesaria, nadie ha salido ileso del desastre. Ahora toca mirar al futuro. Soñar con un ascenso que hay que empezar a cimentar ya. A la afición no se le puede pedir nada. El que se abone deberá ser reconocido por el esfuerzo y el que decida no hacerlo tendrá ser convencido en el césped. Ahí será donde el Cádiz debe decirle a los indecisos que este año sí, que el viaje será costoso pero que se llegará a destino con cara de felicidad. Hoy comienza la campaña. Que cada uno haga lo que quiera pero que nadie se desenganche del equipo que tarde o temprano siempre se vuelve. Casa sólo hay una.