Snowden pide asilo a Rusia y promete no dañar a EE UU

El 'desertor' de la Agencia Nacional de Seguridad de Estados Unidos (NSA), Edward Snowden, apareció ayer en público, por primera vez desde su llegada a Moscú el pasado 23 de junio, para anunciar que se propone solicitar a Rusia el estatus de refugiado político «temporalmente» hasta que pueda viajar a Iberoamérica. Snowden, que se reunió en la zona de tránsito del aeropuerto Sheremétievo con activistas proderechos humanos, diputados y abogados rusos, afirmó que cumplirá la condición exigida por el presidente Vladímir Putin de no perjudicar los intereses de EE UU.

Fuera de la sala en donde se produjo el encuentro esperaban decenas de periodistas que tuvieron que enterarse de lo que dijo Snowden a través de los participantes en el encuentro. La primera en informar a los reporteros fue Tatiana Lókshina, una de las responsables de la antena moscovita de Human Rights Watch (HRW). «Ha pedido asilo en Rusia. Quiere quedarse aquí hasta que pueda volar a América Latina», declaró Lókshina.

En un comunicado aparecido poco después, el excolaborador de la CIA decía: «Pido ayuda para poder trasladarme de forma segura a América Latina y solicito también asilo político a Rusia con la esperanza de que mi viaje pueda ser realizado legalmente». Hasta ahora no ha podido abandonar Moscú a causa de que su país, tras iniciar contra él una causa penal por traición, le anuló el pasaporte.

Por su parte, el diputado ruso Viacheslav Níkonov, que también estuvo en la reunión, manifestó que «conoce la condición -puesta por Putin el pasado 1 de julio- y le ha resultado fácil aceptarla. No tiene intención de causar daño a Estados Unidos (.) todo lo que pudo hacer ha quedado ya en el pasado». Desde el Kremlin, el portavoz de la Presidencia, Dmitri Peskov, reiteraba que tal vez pueda quedarse en Rusia «si renuncia totalmente a cualquier actividad que perjudique los intereses de nuestros socios americanos». El abogado Anatoli Kucherena, miembro de la Cámara Social, órgano anexo a la Presidencia, explicó al canal de televisión ruso que el informático se presentó ayer diciendo que «yo soy la persona que he estado leyendo sus correos electrónicos». Kucherena, que se ha mostrado dispuesto a ayudar a Snowden «en todo lo que necesite», dijo también que este «está indignado por el trabajo de espionaje realizado y ha filtrado la información movido por el deseo de impedir que continúen los atentados contra los derechos humanos».

Según el letrado ruso, «Snowden no ha tenido en ningún momento intención de lucro y la persecución lanzada contra él por Estados Unidos es de carácter estrictamente política», factor que, según su opinión, «facilitará que se le conceda asilo político en Rusia. Yo le ayudaré a conseguirlo porque ya no puede seguir más tiempo en las actuales condiciones».

Kucherena, al mismo tiempo, aclaró que «el término 'asilo temporal' desde el punto de vista jurídico no es correcto. Una vez concedido es definitivo y, al cabo de cinco años, se puede solicitar incluso la nacionalidad rusa». Cuando se le preguntó sobre el tiempo que puede durar la tramitación de la concesión de asilo, Kucherena respondió que «él tendrá que presentar primero la petición al Servicio de Inmigración, de ahí se envía a la comisión presidencial de Ciudadanía y, finalmente, es el jefe del Estado quien tiene la última palabra». El jurista ruso calcula que todo el proceso tardará en culminarse «dos o tres semanas».

Sin salvoconducto

El presidente de la Duma (Cámara Baja del Parlamento ruso), Serguéi Narishkin, se pronunció ayer a favor de conceder asilo al fugitivo. «En Estados Unidos está vigente la pena de muerte y podrían aplicársela a Snowden. No podemos permitir que algo así suceda», señaló Narishkin. Putin ya advirtió el mes pasado que nunca entregará al analista a las autoridades norteamericanas.

Nicaragua, Venezuela, Bolivia, e inicialmente también Ecuador, han propuesto asilo al antiguo técnico de la NSA, pero todo parece más bien un ejercicio de propaganda, ya que ninguna de las ofertas se han materializado en nada concreto, ni siquiera en un salvoconducto de dos o tres días para haber podido viajar. Washington advirtió el lunes a Rusia de que a Snowden no se le debe permitir trasladarse a otro país que no sea Estados Unidos. El portavoz del presidente Barack Obama recordó que «Snowden está acusado de un delito».

La posible huida de Snowden en un avión de Aeroflot hacia Cuba entretuvo los rumores sobre el paradero del joven informático el jueves por la noche. El canal de televisión ruso Rossía-24 aseguró ayer que el inesperado cambio de ruta del vuelo de Aeroflot Moscú-La Habana hizo saltar las alarmas sobre la posibilidad de que Snowden estuviera a bordo. El avión no voló a través de Estados Unidos, que es el itinerario habitual y el más corto. Lo cierto es que, según Rossía-24, el joven norteamericano no estaba entre los pasajeros llegados a la capital cubana. Un portavoz de Aeroflot aclaró que la modificación de la ruta se debió a las condiciones meteorológicas.