La mayoría de las reclamaciones se centran en las telecomunicaciones

La teniente de alcalde de Familia y delegada municipal de Consumo, María José de Alba, realizó un balance del trabajo llevado a cabo por la Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC) durante el primer trimestre del año 2013, donde el sector de las telecomunicaciones fue el más consultado y reclamado por los consumidores isleños. En el apartado de consultas se han contabilizado 2.331, frente a las 2.233 del mismo periodo del año 2012, lo que representa un aumento del 4,39 por ciento. El sector más consultado es el de las telecomunicaciones con 1.293. En los últimos meses, las consultas relacionadas con este sector se centran principalmente en la disconformidad en la factura por servicios de mensajes ''premium'' sin que el consumidor haya causada alta en este tipo de servicios, las penalizaciones por desistimiento en la portabilidad al recibir una contraoferta de su operador e incumplimiento de las ofertas que ofrecen los comerciales de las distintas operadoras para captar clientes. Por ello se aconseja a los consumidores que, en el caso de los mensajes 'premium', soliciten a su operadora la desactivación en este tipo de servicios si no tienen previsto hacer uso de los mismos. En el caso de las portabilidades, asegurarse de las condiciones de las ofertas y las consecuencias de la cancelación. Respecto a las ofertas comerciales, se aconseja que se solicite, previamente a la contratación, las condiciones por escrito.

El segundo sector con más consultas es el de bancos con 192, centradas como suele ser habitual en las comisiones bancarias y últimamente en las cláusulas suelo de las hipotecas.En tercer lugar, en cuanto a consultas, está el sector seguros con 136. En este sector, últimamente las consultas que se formulan tienen relación con la baja en los contratos o no renovación de los mimos, al desconocer el consumidor que para desistir en la renovación de una póliza debe comunicarlo a la compañía con una antelación de dos meses como mínimo, por escrito, de forma que quede constancia. Se da la circunstancia que el consumidor al intentar ahorrar con un cambio de compañía se encuentra con dos contratos de seguros en vigor sobre un mismo bien asegurado.