Osborne, canta otra vez

La anécdota de la semana en el Reino Unido tiene tres protagonistas: el presidente del país más poderoso del mundo, el ministro del Tesoro británico y un cantante de soul que pasaba por ahí. Al parecer, en la reunión del G-8 celebrada el pasado fin de semana en Irlanda del Norte, Obama se refirió hasta en tres ocasiones al ‘Chancellor of the Exchequer’, George Osborne, como Jeff Osborne, y el error del gran líder mundial parece que ha hecho gracia a unos y otros.

En realidad, no había demasiados motivos para confundirse: George es blanco, miembro de la aristocracia británica, descendiente de un barón, hijo del propietario de una gran empresa textil, tiene 42 años y estudió Historia Moderna en la Universidad. Jeffrey Osborne es afroamericano, descendiente de un varón (con v, claro), hijo de un trompetista, tiene 65 años y toda su vida se ha dedicado, con mucho éxito por cierto, a la música.

Por eso, porque no había motivos para la confusión, George pareció sentirse muy molesto con el lapsus de Obama, según han relatado varios testigos a los periódicos ‘The Sun’ y ‘Financial Times’. "Lo siento, tío. Me confundí por culpa de mi cantante favorito de soul, Jeff Osborne", intentó disculparse Obama mientras su colega británico se iba poniendo más y más rojo, según cuentan los diarios.

Pero la historia llegó a los oídos de Jeff, que ha revivido sus momentos de gloria. "Estoy alucinado. No me podía imaginar que Obama fuera tan fan mío que pudiera confundirme con el ministro británico", declaró el intérprete a Sky News, aunque quiso ir un poco más allá: "Y aprovecho para invitar a George a que interprete conmigo a dúo ‘On The Wings of Love’ (uno de sus éxitos) o cualquier otra canción".

Gracias a sus 12 discos, y especialmente, a sus dos números 1 en Estados Unidos ('Love Power' y 'She’s on the Left'), Jeffrey Osborne ha logrado en su carrera cinco discos de oro y platino, además de conseguir un hito muy reconocido en su país: cantar el himno norteamericano antes de dos partidos de las finales de béisbol (1988 y 1990) y de tres partidos de las finales de la NBA (2008, 2009 y 2010).

Sin embargo, la respuesta del político británico acabó con cualquier esperanza. En su cuenta de Twitter escribió: "Jeff, no sugerirías hacer un dúo conmigo si me escucharas cantar…". Lo gracioso del asunto es que ahora mismo, en las casas de apuestas británicas, se paga 3 a 1 que algún diputado de la Cámara de los Comunes le vuelve a llamar Jeff a George.