El cine de género vuelve a mostrar las cicatrices de la Guerra Civil
La cinta española 'Insensibles' aterriza en nuestras pantallas tras un carrerón por distintos países
Actualizado: GuardarMuchas películas en una. Eso es 'Insensibles', película que juega a la mezcla de géneros para acabar a medio camino entre el género fantástico, los filmes sobre la guerra civil, el drama sobre la identidad, y una historia con tintes detectivescos y góticos. He aquí uno de los atractivos de la ópera prima de Juan Carlos Medina, cuyo guión coescribió junto a Luiso Berdejo -guionista de 'REC' y avezado cineasta por cuenta propia-. En las pantallas desde el viernes, 'Insensibles' enlaza con la tradición no sólo de 'El laberinto del fauno', sino de películas como 'El espíritu de la colmena', un cine español muy anterior que se ha valido de la imaginación y lo fantástico para abordar las cicatrices de la Guerra Civil española.
La historia es la de un brillante neurocirujano que necesita un trasplante de médula y para sobrevivir emprende la búsqueda de sus padres biológicos. Todas las respuestas sobre su origen permanecen ocultas en un pasado silenciado, a la vez su pasado personal y el de todo un país. En su investigación descubre que durante la Guerra Civil un grupo de niños nació con un extraño y desconocido mal: eran insensibles al dolor físico. Las criaturas fueron encerradas en un sanatorio en los Pirineos que acabaría convertido en centro de interrogación y torturas del bando vencedor. Contada en dos tiempos, llega un punto de la trama en que pasado y presente se cruzan. La película avanza implacable hacia una catarsis que reivindica la necesidad de buscar la verdad y sacarla a la luz como única forma de sanar las heridas.
«La película reflexiona sobre hasta qué punto se quiere indagar en el pasado y conocer la verdad, sabiendo que en el camino encontrarás dolor y se producirá un descenso a los infiernos», apunta el actor Alex Brendemühl. Protagoniza la película junto a Juan Diego, que se refiere al final de la película como uno de los más «poderosos y poéticos» del último cine español. El director y los actores reivindican la vigencia de la película, dado que «aún hoy siguen pasando cosas horribles que permanecen impunes», según sostiene Brendemühl. «Algo en el carácter español invita a ocultar lo que nos avergüenza o nos causa dolor», señala el director.
Investigación detectivesca
En cierta forma, el personaje principal -encarnado por Brendemühl- funciona, además de cómo el individuo que busca su identidad individual para sobrevivir, como un trasunto de la historia de España: un individuo insensibilizado y enfermo como un país, que debe escarbar en su pasado para sanarse y salvarse a sí mismo y a su hijo. «Mi personaje es fruto del pasado, de esas generación de niños que han vivido el horror. En una investigación casi detectivesca, la película también toca el tema de las adopciones, de esos niños que descubren que sus padres no son quienes dicen ser, y que ellos tampoco son quienes han pensado que eran», explica el actor. Acaba de pasar por Cannes con una película de la argentina Lucía Puenzo, 'Wakolda', que toca un tema similar sobre la ocultación del nazismo en el país sudamericano.
Profundamente metafórica, oscura y extraña, 'Insensibles' pasó por Sitges y por el festival De Toronto, donde inició una carrera internacional impecable que le ha granjeado buenas críticas en los principales medios internacionales y a recibir el premio Mélies a la mejor película europea de cine fantástico.
Su director, Juan Carlos Medina ha iniciado una carrera internacional impulsado por la buena acogida de 'Insensibles'. Prepara ya su debut en el cine británico con la adaptación de la novela de Peter Ackroyd 'Dan Leno & The Limehouse Golem' que ha coescrito con la guionista Jane Goldman ('Kickass') y que sitúa un thriller criminal en la Inglaterra victoriana.