Las lluvias desbordan Europa Central

Las continuas lluvias torrenciales que sufren varios países de Europa Central han dejado un reguero de muerte y destrucción. Al menos ocho personas han perdido la vida en Alemania, Austria y Chequia y miles de personas han tenido que ser evacuadas de sus hogares. Las precipitaciones han provocado inundaciones que han anegado numerosas viviendas, cultivos, carreteras y otras infraestructuras.

En Alemania, donde se ha producido una de las muertes, la situación es especialmente desastrosa en el sur y el este del país. En la ciudad de Passau, situada en Baviera y muy cerca de la frontera con Austria, ha crecido la alerta ante el riesgo de desbordamiento de los tres ríos que confluyen en la zona, el Danubio, el Inn y el Ilz. En Sajonia, miles de policías y de agentes de protección civil trabajaban sin descanso para frenar el aumento de las inundaciones. Mientras, en Austria el número de fallecidos se elevó ayer a dos, después de que en el occidental Estado federado de Vorarlberg se hallara el cadáver de un hombre de 58 años que estaba desaparecido. Entretanto, centenares de habitantes de la región de Salzburgo -unos 300 en la ciudad de Melk- han sido evacuados.

La situación resulta aún más dramática en la República Checa. Al menos cinco personas han perdido la vida y el Gobierno checo ha decretado el estado de emergencia en casi toda la región de Bohemia, donde miles de hogares se quedaron sin electricidad ayer por la mañana, y también en Moravia del Sur. Unas 2.700 personas han tenido que ser evacuadas en Bohemia, y el balance podría empeorar en las próximas horas. Unas 50 localidades se encuentran anegadas por las aguas. Esta situación obligó a una reunión extraordinaria de las autoridades, que aprobaron destinar 300 millones de coronas (unos 11,6 millones de euros) a las labores de rescate y otros 1.300 millones (50,4 millones de euros) para limpieza de los daños ocasionados por las lluvias.

Despliegue de soldados

Unos 2.000 militares han sido enviados por el Ejecutivo checo a las zonas afectadas para construir diques provisionales que frenen la subida de las aguas. La situación es muy grave en localidades como Ústí nad Labem, Decín y Hrensko. En Praga llueve sobre mojado, sobre todo en el centro histórico. Esta zona de la capital, que fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, está gravemente amenazada por las inundaciones, y el Ejército ha levantado diques con sacos de arena para evitar que el desbordamiento del río Moldava afecte al centro histórico.

Las autoridades ya han decretado el estado de máxima alerta en Praga y el Ayuntamiento aprobó una partida de 50 millones de coronas (dos millones de euros) para financiar las medidas excepcionales adoptadas contra las riadas. La empresa de transporte público de Praga decidió cerrar ayer temporalmente las estaciones de metro en el centro de la capital, y en algunas zonas de la ciudad se procedió a limitar la circulación de vehículos y el suministro de electricidad.