Inès de la Fressange y la alegría
Encarnación del chic parisino, es una personalidad única que atraviesa el tiempo con una naturalidad y una frescura desarmante
MADRIDActualizado:Su auténtico nombre delata su buena cuna (Inès Marie Lætitia Églantine Isabelle de Seignard de La Fressange). Hija de una maniquí argentina de Guy Laroche y del excéntrico marqués de La Fressange, de joven no soñaba con ser modelo. Primero quiso ser psiquiatra infantil, después abogada, luego escultora, más tarde pintora... “Me encantaba la ropa y el maquillaje, pero de adolescente jamás hubiera reconocido que era una frívola. Ahora, lo asumo”.
Con sus interminables piernas y su particular manera de caminar, creó un estilo reconocible y único. “Mi falta de profesionalidad, mis continuos tropezones... fueron los demás los que decidieron convertirlos en cualidades y eso me permitió a mí ser cada día más osada”.