París y Nueva York en 110 películas
Capitales de la bohemia y el vicio, las dos ciudades albergan lugares de peregrinación para el cinéfiloLa editorial Lunwerg publica dos guías turísticas en clave fílmica para seguir los pasos de los astros del celuloide
Actualizado:París y Nueva York, capitales de los sueños, la bohemia, el arte y el vicio, son también ciudades fetiche para muchos cineastas. Por algo los hermanos Lumière, inventores del cinematógrafo, filmaron en París, y por algo Nueva York es el escenario de un sinnúmero de películas, desde las arrebatadamente románticas a las que recrean crímenes y tiroteos. El viajero tiene ahora la oportunidad de recorrerlas en clave fílmica. 'París de cine' y 'Nueva York de cine' son dos títulos que acaba de sacar la editorial Lunwerg y que proponen itinerarios que los amantes del cine jamás sospecharían.
Cada una de las guías ofrece 55 películas y dos recorridos temáticos que permiten al cinéfilo y viajero embelesarse con el perfume del 'glamour'. En suma, 110 películas para adentrarse en esos garitos humosos de la ley seca o esos cabarés parisinos donde acecha el pecado.
De Buñuel a Tarantino, de Billy Wilder a Brian de Palma, son muchos los cineastas que han quedado cegados por la ciudad de la luz. Violeta Kovacsiscs y Deborah Marín orientan al lector y el turista por los lugares que pisaron Matt Damon, Audrey Tautou, Harrison Ford o Catherine Deneuve. ¿Qué mitómano puede resistir la tentación de no husmear por los alrededores del apartamento en que Marlon Brando y Maria Schneider protagonizaron sus lances sexuales en 'El último tango en París'? Seguramente nadie.
Trocadero, donde se yergue la Torre Eiffel, es un plató grandioso. Allí transcurren escenas de 'El caso Bourne' o 'El discreto encanto de la burguesía'. Pasado el puente de Bir-Hakeim y delante de los antiguos estudios de Radio France, está la isla artificial en la que se erige una réplica de la Estatura de la Libertad. El lugar resultaba pintiparado para que Roman Polanski rodara el tiroteo final de 'Frenético'.
'Charada', la memorable película de Stanley Donen, regala unas vistas de París impagables. Las arcadas del Palais Royal se antojan perfectas para rodar una escena de acción como la que se desarrolla en este filme, a caballo entre el thriller y la comedia romántica. Las sombras y escondrijos ayudan a infundir emoción al desenlace. Para muchos espectadores, los disparos que se intercambian Gary Grant y Walter Matthau, parapetados ambos tras las columnas, no pueden ocurrir en otro lugar. Monmartre dejó su impronta en la historia del cine gracias a 'Amélie'. Los admiradores de Audrey Tautou deben saber que la frutería donde la actriz hunde sus dedos en un saco de semillas se encuentra en la calle de Trois Fères, en el empinado barrio de Montmartre. Este enclave se ha convertido en un santuario al que peregrinan los cineastas. No en vano, ha acogido el rodaje de 'Los cuatrocientos golpes', de François Truffaut. Será que la angostura de sus calles se presta tanto a acoger filmes de cine negro como comedias arrobadas.
Algo parecido sucede con Nueva York. No parece lo más cómodo calzarse unos 'manolos' de Blahnik para emular las andanzas de la coqueta Carrie Bradshaw en 'Sexo en Nueva York'. Y menos para recorrer la distancia que hay entre la Biblioteca Pública de Nueva York y su abigarrado apartamento en el número 66 de la arbolada calle Perry. Lejos de este rincón del West Village, la Gran Manzana esconde un generoso puñado de escenarios de obligada visita para los mitómanos. Lugares que han forjado parte del ADN de esta gigantesca urbe donde hay comercios cuyo nombre está grabado a fuego en el imaginario colectivo. Ahí está la carísima joyería Tiffany, en el número 727 de la Quinta Avenida, inmortalizada por Blake Edwards en 'Desayuno con Diamantes'; o la mansión escogida por Coppola en Staten Island para que Brando y Al Pacino lucieran su talento en 'El Padrino'.
Lugares inscritos en el celuloide y nuestra memoria sentimental. Es el caso de Central Park, el Museo Metropolitano, el MoMA de Nueva York o la Estación Central, un titánico edificio plasmado en un sinfín de ocasiones, desde 'Con la muerte en los talones' a 'Atrapado por su pasado' o, más recientemente, en 'Los vengadores'. Otros como la cancha de baloncesto de Harlem donde transcurre uno de los primeros momentos de 'West Side Story' o la inmejorable estampa del puente Queensboro sobre el río Hudson, en ese banco donde Woody Allen y Diane Keaton observan el amanecer en 'Manhattan'
Ciudad de encarnizadas batallas entre superhéroes y villanos. El vetusto rascacielos que fue la sede del 'The New York Times' hasta 1995 en Turtle Bay también sirvió para acoger el 'Daily Planet', el periódico de 'Superman'. El edificio se ha convertido en un lugar venerado por millones de fans. Spiderman, Batman o Iron Man también son otros de lo que han hecho sus cameos bajo el 'skyline' neoyorquino.