Casi 10 años para otra gran reforma

Hace años que se habla de la ampliación de Bahía Sur. Han salido a la luz los proyectos, los empleos que se podría generar (hasta 500) y la forma de afrontar la actuación. Sin embargo, no se daban las condiciones para poder llevarlo a cabo. En primer lugar se precisaba de la legalidad urbanística, es decir del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). Ya está aprobado, pero llega demasiado tarde, porque la época hace que sea poco probable que se afronten grandes inversiones. En segundo, porque la firma de este complejo pretende cambiar la filosofía de sus centros comerciales y enfocarlos hacia la gastronomía para aumentar las visitas. A este plan se acogerá Bahía Sur, lo que significa que su posible ampliación se borra de su futuro a corto y medio plazo.

Fue en el año 2004 cuando comenzó su última gran reforma, aquella que precisamente transformó su zona de restauración, la que se pretende volver a modificar. Casi 10 años en los que a pesar de la falta de mejoras, el centro comercial ha seguido siendo líder en la provincia. Pero, la situación ha dado un gran giro y no sólo por la crisis, sino por la aparición de otras superficies comerciales que han comenzado a hacer sombra a Bahía Sur.

Ante ello, la estrategia no será la de tener más tiendas, ya que también son malos tiempos para los operadores que están más dispuestos a reorganizar sus espacios que a abrir tiendas, sino la de buscar otro tipo de negocios, y la gastronomía se presenta como el futuro de Bahía Sur, aprovechando uno de sus grandes recursos, hasta ahora sin explotar; su ventana a la Bahía, con Cádiz de fondo, y su paseo marítimo.

Si todo sale según los plazos previstos, en la próxima Semana Santa podría estar lista la actuación. Sin embargo, una ampliación podría variar entre unos tres o cinco años y precisaría de muchas negociaciones que complicarían la puesta en marcha del proyecto. Bahía Sur no puede esperar tanto, ya que existen estudios que especifican que este centro comercial podría pasar por una situación dramática de aquí a cinco años si no pone algún remedio.

En definitiva, la remodelación de la zona de restauración deja en 'stand by' la ampliación y todo lo que deriva de ella, como la necesidad de aumentar las plazas de aparcamientos, para lo que también se habían realizado estudios para la construcción de un 'parking' subterráneo. Otra gran inversión que precisaría y que por lo tanto incrementa el valor de la ampliación del centro comercial. Lo que no quiere decir que el espacio no sufra un gran cambio, que se evidenciará hasta en los locales más próximos a esta zona de restauración. Ahora habrá que esperar a los resultados.